El ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens, sostuvo este lunes que la aplicación de un impuesto a los gastos turísticos argentinos en el exterior "es una decisión que está en el marco de la ley de emergencia económica, y tiene que ver claramente con cuidar los dólares que tenemos, porque el contexto de fragilidad en el que encontramos la economía argentina requiere de algunas medidas extraordinarias".

El domingo se estableció que el impuesto a los consumos en el exterior subirá al 30%, medida que generó preocupación entre los viajeros y, principalmente, en las agencias de viajes, quienes se atajaron antes de que lo trate el Congreso.

"Esperamos que el impacto que tenga implique un crecimiento interno, del turismo receptivo, porque tenemos que cuidar las fuentes de trabajo del sector", dijo Lammens en Casa de Gobierno.

 

El ministro de Turismo señaló que "sabemos que hay algunas agencias de viajes que pueden sentirse perjudicadas, pero la idea nuestra es cuidar el trabajo argentino, cuidar a las pequeñas y medianas empresas argentinas, y vamos a trabajar en la reglamentación de esa ley junto con el Ministerio de Economía".

"Estamos terminando de definir la letra chica del proyecto, y la idea es tenerla lista para el miércoles", añadió, y explicó que la intención "no es para que se aplique a los consumos industriales", sino que alcance a "los consumos hechos con tarjetas argentinas en el exterior", mientras que "no va a afectar a los gastos de extranjeros realizados aquí en la Argentina".

Comentó Lammens que este lunes por la mañana mantuvo una reunión con las autoridades de la Cámara Argentina de Turismo, a la que calificó como "muy buena", y en la cual "les planteamos que se trata justamente de una ley de emergencia económica, que está tomada en un contexto de crisis y que cuando uno se ve en esta situación tiene que adoptar medidas extraordinarias".