La justicia correntina restituyó este lunes a familiares los restos de un hombre que había sido reportado como desaparecido en 2018 en aguas del río Paraná y cuyo cuerpo fue encontrado un año más tarde, identificación que fue posible gracias al trabajo en conjunto del Poder Judicial, el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) y el Gabinete de Antropología Forense de la Universidad Nacional del Nordeste.

El juez federal de primera instancia de Corrientes, Gustavo del Corazón Fresneda, encabezó esta mañana la audiencia en la que se llevó a cabo la restitución de identidad de los restos humanos hallados el 9 de julio de 2019 en la Isla La Rata, jurisdicción de la ciudad de Bella Vista, precisó hoy el Ministerio Público Fiscal (MPF). El cadáver fue identificado como Rigoberto Pedroza Vega, cuya desaparición fue denunciada por su hermano el 11 de noviembre de 2018.

El hallazgo del cuerpo se produjo al año siguiente como consecuencia de la “extrema bajante del río y generó expectativas tanto en los familiares de personas desaparecidas durante la última dictadura, como en la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía Federal de Corrientes, a cargo de Flavio Ferrini, que viene llevando adelante desde 2005 un proceso de búsqueda de restos” en coordinación con el EAAF.

En consecuencia, este último organismo dirigió la tarea investigativa que fue llevada a cabo por el Gabinete de Antropología Forense de la Universidad Nacional del Nordeste.

Luego de un examen antropométrico y de extracción de muestras óseas, los especialistas llegaron a una primera conclusión: se trataba de una persona joven, de entre 21 a 30 años, entre 1,63 y 1,72 de altura, y que la posible data de muerte sería no mayor a un año por la consistencia de la medula ósea, información que además estaba complementada por el hallazgo de una malla de hombre.

Esta información fue entrecruzada con datos de “personas que pudieran estar desaparecidas como consecuencia de la inmersión en las aguas del rio Paraná en la época y en la zona cercana al hallazgo” y fue entonces cuando se advirtió la denuncia por averiguación de paradero de Pedroza Vega.

La Unidad de Derechos Humanos de la fiscalía federal dio con el paradero del Hernández Pedroza -hermano de la víctima-, quien brindó muestras para su posterior cotejo genético.

Recientemente, el resultado de los estudios estableció un nexo de compatibilidad de un 99,99% entre las muestras obtenidas por lo que la justicia convocó a Hernández Pedroza y le restituyó los restos de su hermano.

Desde la Unidad de Derechos Humanos se indicó que este caso expresa la necesidad de “profundizar el compromiso de todas las agencias del estado para que, aplicando la ciencia con sentido social, se pueda dar respuesta a situaciones de personas desaparecidas en la actualidad”.

(Télam)