Las diversas variantes del peronismo que conforman el Frente de Todos se encaminan a sumar desde diciembre unas 120 bancas en la Cámara de Diputados, cerca del qúorum propio, mientras que Cambiemos conservará más de 100 escaños si se repiten en octubre los resultados de las PASO.

Con el ingreso de 70 diputados, el Frente de Todos puede armar un interbloque con aportes del Frente para la Victoria, del Frente Renovador, del PJ, de Red Argentina, del Movimiento Evita, de Somos, de los peronismos de San Luis y Catamarca, y de un par de líberos justicialistas, bancadas que hoy actúan con identidad propia.

Exponentes del Frente para la Victoria y de Unidad Ciudadana, incluyendo a los camporistas, serían mayoría en el bloque con unos 65 representantes; en tanto que el peronismo sumaría unos 35; el massismo unos 10 y aliados como Victoria Donda, Pino Solanas o Facundo Moyano, completarían el interbloque.

En ese escenario, al que podría ser el oficialismo, le faltarían unos 10 votos para llegar a los 129 del quórum propio, número que podría alcanzar recurriendo a una decena de diputados referenciados en los gobiernos de las provincias de Santiago del Estero, Córdoba, Misiones.

Un cuarto sector los integran los siete diputados que en esta elección se referencian en la candidatura presidencial de Roberto Lavagna, y que incluye a ex massistas como Graciela Camaño y Marco Lavagna, socialistas santafesinos, peronistas como Eduardo Bucca y Pablo Kosiner.

La izquierda, por su parte, quedaría desde diciembre con dos diputados.

La situación de Cambiemos

La segunda fuerza, con unos 10 diputados menos, sería Cambiemos, que mantendría su número de aproximadamente 110 bancas, pero que en caso de una derrota presidencial deberá estar atento a mantener unidos a sus diferentes espacios, el PRO, la Unión Cívica Radical (UCR) y la Coalición Cívica (CC).

Dentro de Cambiemos, solo se alteraría la relación de fuerzas de sus integrantes: el PRO que hoy tiene 55 escaños bajaría a 45 y quedaría en igualdad de fuerzas con el radicalismo, que pasaría de 39 a 45; aunque éste ultimo sumaría a tres aliados al radicalismo para imponerse.

La Coalición Cívica pasaría de 10 a 14 escaños y recuperaría presencia el Frente Cívico de Córdoba, con el ingreso de su líder, Luis Juez.

(Télam)