Cuando Megan Fox presentó su última película, en agosto del año pasado, anunció públicamente una noticia bastante triste. Después de diez años, se separaba de su pareja, Brian Austin Green, con quien ya tiene dos hijos, Noah y Bodhi.

Los meses pasaron pero la separación no se terminaba de concretar. Al menos, la pareja continuaba viviendo en la misma casa junto a sus hijos y hasta se los había visto caminando juntos de la mano. Pero eso no extrañó tanto, quizá se tratara sólo de una más de esas rupturas amigables.

Lo que terminó por derramar el agua del vaso fue la última pasada de la actriz por la alfombra roja, donde se la vio... ¡con panza de embarazo! Sí, pequeña pero evidente, ahí estaba esa curva que demostraba que algo estaba sucediendo o, mínimamente, algo había sucedido. Habrá que esperar y ver qué anda pasando por ahí.