Las Fuerzas Armadas de Chile ampliaron el operativo de búsqueda del avión de la Fuerza Aérea (FACh) desaparecido el pasado lunes camino a la Antártida con 38 personas a bordo y del que después de casi dos días no se tienen pistas de su ubicación ni indicios de lo ocurrido.

La búsqueda se amplió tanto en efectivos como en capacidad aérea y marítima, con la llegada de nuevas aeronaves y embarcaciones para tomar parte en los trabajos en el mar de Brake, que separa Chile del continente helado y donde se perdió la pista del aparato siniestrado, a unos 500 kilómetros antes de llegar a su destino.

El Hércules C130, que despegó este lunes a las 16.55 hora local de la base Chabunco, en la ciudad de Punta Arenas, debía aterrizar a las 19.17 hora local en la Antártida, pero perdió el contacto a las 18.13 hora local, cuando sobrevolaba el mar de Drake, cuyas aguas están consideradas unas de las más turbulentas del planeta.

El avión tenía una carga de combustible como para poder volar hasta las 00.40 hora local del martes, momento en el que la FACh dio por "siniestrado" el aparato. En tanto, los motivos del suceso aún son desconocidos.

A bordo de la aeronave, viajaban 38 personas: 32 militares de las Fuerza Aérea de Chile (FACh), tres miembros del Ejército y tres civiles, de lo cuales dos son trabajadores de la empresa de ingeniería Inproser y otro es estudiante de la Universidad de Magallanes.

El avión trasladaba personal que iba a hacer tareas de mantenimiento en la base Presidente Eduardo Frei Montalva, entre ellas un tratamiento anticorrosivo de sus instalaciones, además de revisar el oleoducto flotante que abastece de combustible a la zona.

De confirmarse el siniestro, sería la peor tragedia aérea en el país desde 2011, cuando cayó al mar un avión con 21 personas que se dirigía al archipiélago Juan Fernández, a unos 670 kilómetros de la costa chilena, cargado de ayuda humanitaria para su reconstrucción tras el terremoto de magnitud 8,8 de 2010.

(EFE)