El calorcito se puso el overol y se puso a laburar. De a poco empezará a calentar la jornada y sumarán 31 grados a la tarde con un buen sol. No será un infierno pero se empieza a alejar de la primavera.

Todo esto después de una madrugada fresca, con un soplido lindo del viento que hizo recordar a las noches de la costa atlántica. No se sabe bien hasta cuándo durará ese frescor que te hace buscar a oscuras la sábana para taparte, pero ha disfrutar mientras dure. La semana sigue encendida.