Con pocas palabras podría calificarse a este lunes: infernal. Se espera una jornada tremendamente calurosa con un termómetro que rozará los 36 grados y que de arranque se hará sentir. 

Cielo despejado, con sol redondo y naranja, y difícil para caminar por la calle. El asfalto será lava después del mediodía. Así que a buscar a alguien con pileta, preparar dos o tres termos de tereré y a acomodarse en la sombrita. 

Recién a la tarde  cambiará el viento y soplará del sur, se nublará y aparentemente a la noche o a más tardar a la madrugada caerá agua. Después de esas tormentas picantes después de jornadas de mucho calor.