Continúa el alerta amarillo por las temperaturas extremas que se registran esta semana en la región. Este jueves el termómetro marcará los 41°C en el momento más calcinante de la tarde, bajo un cielo desprovisto de nubes que ni siquiera mitiguen un poco el picor del sol.

Hay que tomar todos los recaudos contra el golpe de calor. Casi ni se nota que el aire se mueva algo, y al menos la humedad no complica las cosas y se mantiene entre 52 y 55 por ciento. 

Y todavía falta el viernes, quizás el día de mayor temperatura máxima en esta semana. Queda también el sábado, que será otra jornada tórrida, y ya con la tormenta anunciada para el domingo el infierno empezará a menguar, o al menos a brindar un respiro temporal.