La ola de calor no afloja y este miércoles tiene un número redondo para ofrecer: 40. Esos grados son los que pegarán en la tarde rosarina cuando la máxima explote y el ambiente se ponga denso y naranja. 

Lo bueno es que la mañana arranca fresquita, con 24 grados pero una brisa del este divina. Realmente agradable a primera mañana aunque, de un momento al otro, el termómetro se chiflará y ascenderá hasta los 40. Unos grados más para el miércoles y jueves. El cielo seguirá soleado con alguna nube blanca intentando hacer magia.