Fue una semana agitada para la actividad del Concejo Municipal, como ocurre todos los años al ir expirando las sesiones ordinarias y los temas aprietan la agenda. Esto mismo ocurrió con el aumento en la tarifa de transporte urbano, aún con muchas vueltas y sin definición. 

El martes, en los pasillos del Palacio Vasallo, los concejales y sus asesores trataron de acordar una cifra y poder cerrar la polémica tarifa del boleto. ¿En qué terminó? Se prorrogó el debate para el jueves. Día en que también volvió a repetirse la misma imagen: el boleto puede esperar una semana más, hasta la última sesión ordinaria.

Sin embargo, sí se aprobó este jueves el proyecto de Presupuesto 2015 y la modificación de la Ordenanza General Impositiva que incluye un aumento de la Tasa General de Inmuebles (TGI) del 29 por ciento, muy por debajo del 78 por ciento que pretendía el Ejecutivo, y algunas alícuotas del Drei de grandes contribuyentes.

El presidente del Concejo volvió a renovar por un período más su cargo, la décima en las espaldas de Miguel Zamarini, en una negociación de la que el PRO salió herido tras no poder acceder a la vicepresidencia 1era y todo quedara entre el oficialismo y el kirchnerismo.

Eterno boleto

El Ente de Movilidad arrojó una tarifa de 5.68 pesos, muy por encima de los 4.30 pesos que se abonan actualmente. Aunque en un momento se habló de alinear posturas en torno a los cinco pesos por boleto, todo quedó truncado. Incluso desde el socialismo pretenden que se apruebe sí o sí por encima de los cinco pesos.

Justamente el oficialismo no pudo reunir los 12 votos necesarios, ya que los radicales Sebastián Chale y María Eugenia Schumuck fueron terminantes con su negativa respecto a tocar la tarifa. Por su parte, el peronista Osvaldo Miatello había condicionado su apoyo, y podría ser un comodín.

El interbloque kirchnerista marcó de arranque su oposición a trasladarles el aumento a los ciudadanos, y se posicionó en la búsqueda de intervención provincial, ya que la ley de Obra Menores que podría haber dado respiro a la situación, cayó en la Legislatura provincial. Pero Bonfatti aclaró que no destinará fondos para esta situación crítica que acontece en el sistema de transporte.

Otro condimento es el pago de los bonos extra a los choferes, que según fundamentó la misma intendenta, las empresas no lo podrían afrontar si no se toca la tarifa. La semana será clave, arrancando desde el lunes y con la expectativa de que el jueves el recinto tenga una definición al respecto.