Los docentes del Instituto Politécnico resolvieron declararse en estado de retención de tareas, por lo que el dictado de los talleres está suspendido desde este lunes al mediodía, debido a la falta de mantenimiento en el edificio de Ayacucho al 1600.

“El colegio está  en estado lamentable, hay falta de mantenimiento. La situación es crítica”, dijo Enrique Romani, uno de los docentes de la escuela dependiente de la Universidad Nacional de Rosario y donde se educan alrededor de mil adolescentes.

 

 

“Tenemos problemas edilicios, el taller de fundición está cerrado desde el año pasado por peligro de que caigan tejas sobre alumnos y docentes, hace cinco años que no hay gas en el colegio. Durante el invierno la necesidad de calefacción nos hace acudir a la red eléctrica pero el consumo excesivo hace colapsar la red. Tenemos problemas con los baños, con el agua potable, la situación no da para más”, acotó el profesor.

En una asamblea realizada este mediodía, el cuerpo docente resolvió “exigir a la UNR que elabore plan integral de obra para poder trabajar en condiciones seguras. Exigir a la escuela que junto con los departamentos elabore plan de contingencia para que no se pierdan las clases cuando algún sector deba ser cerrado. Resulta que para no perder clases empezamos a darlas en el patio del taller, y eso se terminó naturalizando, como que es normal dictar clase en un patio. Entonces planteamos hacer retención de tareas hasta que se subsane de manera fehaciente el deterioro de los techos”, concluyó Romani.

 

 

Techos rotos, humedad en paredes y techos, paredes electrificadas, entre otros, generan condiciones de inseguridad para docentes y estudiantes. Así las cosas, los alumnos dan clases de algunos talleres –como fundición- en el patio. También siguen inconclusas las obras del gas, por lo que estudiantes y docentes avizoran un invierno sin calefacción.

En ese orden, los docentes reclamarán a las autoridades un plan de obra que permita solucionar los problemas estructurales del histórico edificio. Al mismo tiempo, señalan  que se debiera controlar las obras que se han realizado en el último tiempo ya que se han deteriorado con premura.

Sectores que se vieron recientemente afectados por obras, hoy muestran el mismo problema que antes de los trabajos (las filtraciones son uno de los principales). Ello evidencia la ausencia de control sobre obras que implican el uso de recursos públicos y afectan la enseñanza de casi mil adolescentes.