La crisis del Paraná no solo es grave por lo pronunciado de la bajante, sino también por su prolongación en el tiempo. En pocas semanas se inicia la tercera primavera en situación de bajante, y los efectos e impactos no solo se observan sobre el cauce, sino que se propagan en lo profundo de los territorios aledaños al río.

Es por eso que el INTA elaboró un proyecto de estudio para determinar los impactos sobre los sistemas de producción y los efectos ambientales acumulativos de esta extendida bajante en los territorios, trabajando con los principales actores de esta amplia región. 

Alejandro Longo, director del Centro Regional del INTA santafesino, precisó en dialogo con Leo Ricciardino en Sí 98.9 que “los principales problemas son ambientales y productivos y tienen similitud con la mayoría de las zonas del país afectadas por la sequía”. El especialista agregó que hay impactos directos, los que no se ven y los que se irán viendo en medida que la situación se prolongue en el tiempo.

Una de las preguntas en ese sentido es qué pasará con la flora y la fauna de la cuenca, situación que todavía no puede dilucidarse porque no se sabe hasta cuándo será el impacto de la bajante. Entre algunos de los principales impactos productivos se puede mencionar la ganadería de islas, bajos y de áreas costeras afectadas por la baja disponibilidad y aptitud del forraje, así como por la falta de agua para consumo de los animales.

“Hay un problema para sacar a animales de las islas que ya están terminados (listos para faena), la navegabilidad de acceso a esos territorios se complicó muchísimo”, marcó el representante del INTA, que indicó conjuntamente que se puede incluir también entre las actividades dañadas la apicultura, porque la bajante genera su impacto en la floración de especies nativas o porque aparecen de especies invasoras.

Asimismo, para sumar complejidad a la situación, esta semana volvieron a notarse focos de incendio frente a la ciudad de Rosario, situación que podría recrudecerse por la excesiva sequía. Para Longo no hay dudas que así será porque “no hay barrera natural que detenga el fuego”.

En lo puntual, el referente destacó luego que a nivel productivo se reportaron problemas con el cupo de cargas portuarias ya que la producción de la cosecha (soja, maíz, sorgo) y de carne de la provincia sale del puerto rosarino. “Actualmente, los barcos no cargan su capacidad total. Más allá de las pérdidas de divisas ocasionadas, a nivel provincial afecta la actividad de productores y transportistas”, acentuó Longo.

Aquí el audio de la nota completa:

#EstamosDeVuelta - Alejandro Longo INTA by Sí 989