Un dibujo de Leonardo Da Vinci, uno de los pocos conservados que no está registrado en un museo, fue encontrado por la casa de subastas francesa Tajan entre un conjunto que aportó un propietario privado. Ahora prevén vender la obra en unos 15 millones de euros.

"Cuando vi la obra pensé que podía ser importante, pero yo mismo no creía que fuera un Leonardo", asegura el responsable de cuadros y dibujos de Tajan, Thaddée Prate, que fue quien la recibió.

El propietario llegó a París con su carpeta bajo el brazo poco antes del verano, pero las labores de verificación han hecho que no se haya informado del hallazgo hasta ahora. Venía junto a otros dibujos que había heredado de su padre, coleccionista aficionado de libros, con la intención de sacar algo de dinero.

Bajo el título de "Miguel Ángel", la carpeta escondía un boceto del martirio de San Sebastián que llamó la atención de Thaddée Prate el responsable de los dibujos de la casa Tajan. "Era de lo poco que merecía la pena. No me fié de lo que ponía en la carpeta, pero preferí tener otra opinión", relata.

Por eso acudieron a la mayor autoridad sobre dibujos de esa época, la conservadora experta del Museo de Museo de Arte Metropolitano de Nueva York, Carmen C. Bambach.

Las conclusiones que Bambach publicó databan la obra en torno a 1480, al final del primer período florentino del artista. La experta también se fijó en el reverso del dibujo, donde aparecían dos esquemas científicos, uno sobre las sombras que crea una vela y el otro sobre el efecto de los rayos luminosos proyectados tras un obstáculo, posteriores al dibujo.

Ahora la casa de subastas tiene previsto vender la obra en junio próximo y la valora en unos 15 millones de euros (15,8 millones de dólares), pero antes debe recibir el aval del Estado, que tiene derecho a quedarse con el dibujo si así lo considera.