El Registro Nacional de Femicidios, Femicidios Vinculados, Trans/Travesticidios y otras muertes violentas informó este lunes que del 1ª de enero al 31 de julio de este año se contabilizaron 30 muertes violentas de mujeres en la provincia, de las cuales 17 fueron en contexto de narcocriminalidad y delitos conexos. Además, hubo seis femicidios y siete muertes todavía en investigación. Y se contaron 15 intentos de femicidios en todo el territorio santafesino. A nivel nacional, hubo en total 239 muertes violentas de mujeres, travestis/ trans. Esto da un promedio de una muerte cada 21 horas. 

El informe difundido y realizado por Mumalá revela las formas más extremas de violencia de género ocurridas en lo que va del año en todo el territorio argentino. Se realizó a partir del análisis y monitoreo de medios digitales y gráficos de todo el país, buscadores, sistema de alertas, seguimiento de organizaciones, portales especializados en género, feminismo, DDHH y policiales/forense. 

Frente a las estadísticas brindadas por el informe que se actualiza mes a mes, Mumalá renovó el pedido al gobierno nacional de declarar la Emergencia Nacional en Violencias de Género, “VIOLENCIAS DE GÉNERO, con el objetivo de incrementar y priorizar recursos humanos y económicos para la atención integral de mujeres e integrantes del colectivo LGTBIQ+ en situación de violencia de género”.

Los datos: 

En lo que va del año se contabilizaron 239 muertes violentas de mujeres, travestis y trans. De ese total, 152 son femicidios, femicidios vinculados y trans- travesticidios; 37 muertes violentas asociadas al género, vinculadas a economías delictivas o colaterales (narcotráfico, venganzas, deudas, etc.), y a delitos comunes (tales como robos, ajustes de cuenta, venganza y extorsión). Además, hay registrados 6 suicidios feminicidas y 44 muertes violentas de mujeres que están en proceso de investigación. Detrás de estas estadísticas hay historias de vida y además, 149 niños, niñas y adolescentes que se quedaron sin madres.

Según Mumalá, las provincias que presentan las tasas más altas de femicidios al mes de julio son Chaco, Neuquén, Santiago del Estero, La Rioja y Formosa.

El 55 % de los femicidios fue cometido por parejas o ex parejas y el 15 por ciento, por hombres conocidos por la víctima. La edad promedio de las víctimas es de 37 años. El 27 por ciento de las muertes contabilizadas fueron con heridas de arma blanca y el mismo porcentaje corresponde a las asesinadas con armas de fuego. Los datos indican que el 16 por ciento de las víctimas fueron asesinadas a golpes. En el 20 por ciento de los casos se utilizó algún mecanismo para deshacerse del cadáver u ocultarlo. La edad promedio de los victimarios es de 39 años.

El 22% de mujeres víctimas de femicidios había denunciado a su agresor. De aquellos que contaban con denuncia, el 77% tenía orden de restricción de contacto o perimetral y el 22% botón antipánico. El 66 por ciento de los femicidios fueron cometidos en la vivienda de la víctima o en la vivienda compartida, de eso se desprende que la propia casa sigue siendo el lugar menos seguro para las mujeres. 

El 47% de las víctimas tenían hijos e hijas: en todo el país, 149 niños, niñas y adolescentes se quedaron sin madres.

Entre el 1 de enero al 30 de julio de 2023, se sistematizaron 37 muertes violentas asociadas al género, entre las cuales se cuentan delitos comunes (robos, intentos de robo, extorsión, venganza, ajustes de cuenta), aquellas vinculadas al narcotráfico (ataques directos en bunker, balaceras vinculadas, etc), y también aquellas muertes accidentales, dudosas, en la cual la víctima se encontraba en un contexto de violencia de género.