Las Pymes no levantan cabeza y desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) volvieron a advertir sobre la necesidad de transferir el capital financiero al productivo.

“Los pasivos financieros de las pymes ascienden a los 490 mil millones de pesos en créditos, con tasas que promedian entre el 50 y 60% anual”, dijo el referente de la entidad.

Según anticipó el empresario, más de 150 mil millones de pesos serán pagados en concepto de intereses (sin contar el CFT), que serán utilizados en el canal especulativo. “En momentos difíciles necesitamos medidas audaces”, expresó Díaz Beltrán.

La semana pasada, la CAME le había enviado en una misiva al ministro de Producción de la Nación, Dante Sica, con un conjunto de medidas que el sector necesita ante los serios problemas de financiamiento.

En dicho documento, las Pymes solicitaban bajar de 29% a 21% la tasa por los créditos subsidiados para descontar cheques, poner a disposición créditos blandos para financiar capital de trabajo, comprar insumos, maquinaria, y financiar exportaciones, etc.

En tanto, este martes, unos 200 dirigentes de federaciones y cámaras empresarias de las provincias de Corrientes, Misiones, Chaco, Formosa, Entre Ríos y Santa Fe se reunieron para abordar las problemáticas que aquejan al sector, como la fuerte presión fiscal, tasas y acceso al crédito, competitividad, rentabilidad, tarifas y venta ilegal.

“Dependemos del financiamiento y resulta que las pymes estamos financiando al Estado, como por ejemplo con el anticipo del Impuesto a las Ganancias”, manifestó el presidente de CAME y agregó: “La presión fiscal es insostenible, sobre todo la de Ingresos Brutos, que es un impuesto sumamente distorsivo”.