El Grupo de Irrupción del Servicio Penitenciario provincial realizó nuevamente una requisa en busca de elementos de peligrosidad o tecnología de comunicaciones prohibida, esta vez en los pabellones de la Unidad Penitenciaria Nº1, en la ciudad de Coronda.

Los agentes secuestraron más de 30 teléfonos celulares y otros elementos no permitidos, como armas blancas y estupefacientes. Del procedimiento participaron unos 100 efectivos de diversas secciones que requisaron cada una de las celdas, que usaron paletas para detectar los elementos tecnológicos.

 

La requisa tuvo lugar luego del horario de visita de familiares de internos, de la misma manera que ocurrió hace dos semanas, cuando se hallaron más de 50 celulares en la cárcel de Piñero.

Los elementos secuestrados fueron puestos a disposición del Ministerio Público de la Acusación para que lleve adelante las medidas correspondientes y se informó el nombre de cada uno de los internos que contaban con dichos elementos.

Esta medida comenzó a implementarse en las últimas semanas para reforzar los controles en cuanto a las distintas maniobras que implementan para evadir los registros que se hacen previo a la entrada de alimentos que ingresan los días de visitas.