Los hermanos Martín y Christian Lanatta y Víctor Squillaci escucharán este miércoles su cuarta sentencia conjunta, en este caso cuando un Tribunal de Santa Fe dé a conocer su veredicto en el juicio por privaciones de la libertad y robos cometidos en la zona de Cayastá la provincia tras su fuga del penal de General Alvear, donde estaban detenidos por el triple crimen de General Rodríguez, a fines de 2015.

El fiscal Estanislao Giavedoni solicitó 15 años de prisión para cada uno y pidió la unificación con las condenas anteriores, incluida la de prisión perpetua dictada por la Justicia Federal de Mercedes por el asesinato de Sebastián Forza (34), Damián Ferrón (37) y Leopoldo Bina (35), por la que estaban presos cuando huyeron del penal.

La segunda pena fue por la fuga de General Alvear, donde cumplían sus condenas, y estuvo a cargo de la Justicia Federal de la Plata, que los condenó en octubre pasado a 7 años y medio de prisión, en tanto la tercera fue decidida por el Tribunal Oral Federal de Santa Fe, que los sentenció a otros 10 años (en el caso de Martín Lanatta) y 8 años (Christian Lanatta y Schillaci) por enfrentamientos y robos a gendarmes.

Pero la de mañana tampoco será la última sentencia que los hallará juntos, ya que tienen pendiente la "tentativa de homicidio" en perjuicio de los policías Lucrecia Yudati (33) y Fernando Pengsawath (23), quienes resultaron malheridos el 31 de diciembre de 2015, cuando intentaron detenerlos en la localidad bonaerense de Ranchos.

De los tres imputados, el único que tenía antecedentes antes de ser penado por el triple crimen era Schillaci, con dos condenas menores en Quilmes, la ciudad de origen de los tres.

Este miércoles, el tribunal encabezado por el juez Eduardo Pocoví dará a conocer el fallo respecto de los delitos de privación ilegítima de la libertad agravada (en dos casos Martín Lanatta y en tres sus socios) y robos calificados por actuar en banda y con armas de fuego, en un caso por haberlo hecho en poblado y la restante en despoblado.

Los secuestros del ingeniero, el productor agrónomo y el arrocero

En este debate afrontan cargos por la privación ilegítima de la libertad del ingeniero agrónomo Juan Ignacio Reynoso (32), quien trabajaba en San Carlos y el 7 de enero de 2016 fue interceptado por los prófugos cuando circulaba en su Volkswagen Amarok color blanca.

Reynoso estuvo cautivo de los tres delincuentes hasta el 9 de enero y fue despojado de su vehículo, con el que los fugitivos volcaron en cercanías a la localidad de Cayastá, situación en la que fue recapturado Martín Lanatta (46).

El accionar delictivo continuó ese mismo día en la localidad semirrural de Campo del Medio, donde según el expediente Christian Lanatta (43) y Schillaci (37) privaron de su libertad al productor agropecuario Héctor Ferreira, a quien maniataron con un cable de teléfono y le robaron una camioneta que luego aparecería abandonada.

El tercer episodio de la saga también involucra a Schillaci y al menor de los Lanatta y tuvo como víctima a Franco Martín, un empleado de la arrocera Spalletti de Cayastá, donde fueron recapturados el 11 de enero de 2016.

Para el fiscal Giavedoni, los tres acusados estaban en pleno uso de sus facultades y tienen conocimiento de lo que son la vida en relación, en sociedad y en familia, por lo cual sabían las consecuencias que iban a tener sus actos.

Por su parte, el defensor Jorge Miró señaló en su alegato que los hechos que se investigan pueden denominarse "carrera por la vida" y pidió la absolución de sus clientes, quienes según su teoría actuaron bajo la figura de "necesidad justificante".