El diputado provincial Carlos Del Frade presentó un proyecto de ley para que una persona pueda declarar formal y anticipadamente su voluntad respecto de su negativa a someterse a prácticas médicas que prolonguen su agonía en casos de imposibilidad de recuperación. Esto es lo que se llama, en resumen, el debate sobre el derecho a una muerte digna.

La persona con plena capacidad de obrar podrá dejar de manifiesto su negativa a someterse a medios, tratamientos o procedimientos médicos de encarnizamiento terapéutico que pretendan prolongar de manera indigna su vida, según la iniciativa que plantea el legislador.

La persona mayor de edad y en pleno goce de sus facultades mentales tendrá este derecho personalísimo mediante una Declaración de Voluntad Anticipada (DVA). Allí dejará asentado las instrucciones para ser sometido o no a determinados tratamientos médicos, como forma de previsión ante la pérdida de la capacidad de expresar su voluntad en ese momento.

Según el articulado, “las instrucciones deben contener la expresión del declarante según la cual ordena al médico o institución a abstenerse de someterlo a medidas desproporcionadas o de encarnizamiento terapéutico que sólo sirvan para prolongar artificialmente su agonía”.

El proyecto de ley hace una aclaración relevante: la aplicación no permite ni faculta, bajo ninguna circunstancia, la realización de conductas que tengan como consecuencia el acortamiento intencional de la vida, la eutanasia o la provocación de la muerte por piedad.

Par llevar a cabo lo descrito, Del Frade propone crear el Registro Único de Voluntades Anticipadas dependiente del Ministerio de Salud de la Provincia de Santa Fe, en el que se inscribirán las Declaraciones de Voluntad Anticipada (DVA) como así también su revocación.