El gobierno de Estambul prohibió la marcha convocada por organizaciones por el inicio de la Semana del Orgullo Gay y luego reprimió, este domingo, a los manifestantes de grupos de lesbianas, gays, transexuales, bisexuales e intersexuales (Lgtbi) que de todas maneras se concentraron en la simbólica plaza Taksim para reclamar la igualdad de derechos y el fin de la creciente islamización de la sociedad. 

"No estamos asustados. No vamos a dar un paso atrás ni vamos a rendirnos. Estamos aquí de nuevo y vamos a demostrar que estamos luchando por nuestro orgullo", escribieron los grupos organizadores de la marcha en la red Twitter al mismo tiempo que la Policía de Estambul comenzaba a detener y a reprimir con gases lacrimógenos y balas de goma a manifestantes y periodistas. 

Al menos 40 personas fueron detenidas, en una escena que no es nueva en Turquía y, especialmente, en la plaza Taksim, un lugar que supo ser el epicentro de las protestas de la izquierda y las minorías, pero que, desde hace años, las autoridades islamistas del Partido de Justicia y Desarrollo del presidente Recep Tayyip Erdogan cerca y veta a toda manifestación. 

La Marcha del Orgullo Gay en Estambul comenzó a realizarse en 2003, pero fue recién en 2015 que las agrupaciones sufrieron la primera gran represión policial. 

El gobierno prohibió el desfile y luego reprimió a los que se animaron a salir a las calles, luego que el año anterior decenas de miles de personas habían marchado en un clima de paz y alegría, en una convocatoria difícil de replicar en otro país del mundo islámico.