El juez Marcelo Bailaque se declaró incompetente para encabezar la investigación por la desaparición forzada de Gerardo Escobar y este viernes, la familia del joven fallecido en agosto de 2015 apelará la resolución para impedir que la causa se quede en la justicia provincial. Desde las 9, en Tribunales Federales, habrá una concentración para acompañar el reclamo.

Los letrados querellantes recalcaron que la decisión de Bailaque es “arbitraria y discrecional” y por eso, con la apelación, buscarán “revertir ese fallo que reviste gravedad institucional porque en sus fundamentos no sólo toma de manera aislada las evidencias para evitar la carátula de desaparición forzada sino que legitima el hecho que una persona ingrese a una comisaría y no sea registrada porque dice que no es clandestino”.

En el comunicado difundido por los abogados, miembros de la Asamblea por los Derechos de la niñez y la juventud, se destaca que “Bailaque contradice los avances que ha tenido la causa hasta el momento, puesto que tanto la fiscalía provincial, jueces de primera y segunda instancia de la justicia provincial e incluso la fiscalía federal aceptaron que la investigación de los hechos avanzó al punto tal de considerar necesario que la causa se investigue en el fuero federal bajo la carátula de desaparición forzada de persona”.

La querella, conformada por la hermana y madre de Gerardo, recordó que el juez Bailaque también se opuso a tomar la causa por la desaparición forzada de Franco Casco, cuando se reunieron las garantías para que esa investigación pase al fuero federal.

En febrero, la jueza Georgina Depetris resolvió que la causa por la muerte de Pichón  Escobar pasara a la Justicia federal. En total, son cinco personas las que se encuentran imputadas por homicidio y encubrimiento, entre ellas dos policías. Este viernes, una vez más, la familia se plantará ante otra piedra que se cruza en el camino.