El concejal electo Roberto Sukerman reclamó que "todas las concesiones pasen por el Concejo" para que "situaciones de irregularidades no vuelvan a repertirse". La iniciativa responde a la detección de restaurantes y bares concesionados de la Costanera que estaban usando energía pero no la pagaban, un escándalo que se destapó tras una denuncia de la EPE y que este martes derivó en una quita de la concesión. Hay, además, un pedido de informes por parte de los ediles al municipio sobre este tema.

El dirigente justicialista recordó que en el Concejo existe un proyecto, de 2013, que plantea la regulación integral de la concesiones de espacios públicos “para que situaciones de irregularidades no vuelvan a repetirse”, pero se quejó de que “nunca fue aprobado por el socialismo y sus aliados”.

Suerkman considera que debe ser el cuerpo el que determine el uso que se le dará al espacio público, evaluando la ecuación económica financiera del emprendimiento y estudiando el impacto ambiental.

Explicó que "cuando se quiere otorgar un espacio público a un privado, en general en espacios privilegiados sobre el río, debe darse el debate en el Concejo para discutir si queremos o no privatizar ese espacio público”, y fustigó que "a punta de lapicera resuelven sobre los espacios públicos de la ciudad sin pasar por el Concejo y el Estado pierde su poder de control”.

En otro orden de cosas, calificó de “imperiosa” la necesidad de realizar una auditoría para que se determine el monto del perjuicio que hicieron estos bares concesionados.