Un muchacho del barrio Parque Casas murió este jueves en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez, luego de agonizar durante dos días por un disparo infligido por su ex cuñado, agente del Comando Radioeléctrico de Rosario. El imputado está preso, ahora por homicidio agravado, junto con su hermano, también agente policial, acusado de encubrir el crimen.

La víctima se llamaba Matías Sosa y tenía 25 años y dos hijos. El domingo al mediodía se desató una pelea en Uriarte al 1500 (entre Unión y Medrano). Según el relato oficial, Sosa había arrojado una piedra que rompió un espejo del auto de su ex cuñado y vecino, Franco Villarruel, de 34 años. Eso detonó una discusión que venía prologada por diferencias previas. A la disputa se sumó Víctor Villarruel, de 33 años y hermano de aquel. Este trabajaba como agente en la seccional 21ª de Policía. 

La pelea derivó en que el mayor de los Villarruel empuñó un arma y baleó a Sosa en el pecho. Víctor también habría disparado contra Sosa. En tanto, un hermano de la víctima vio la escena y escapó a la carrera, perseguido por los hermanos Villarruel, ante la vista de una patrulla policial que había arribado al lugar advertida de los incidentes previos.

Por ese episodio, la jueza Paula Álvarez imputó a los hermanos Villarruel por tentativa de homicidio agravado y les dictó prisión preventiva, a pedido del fiscal Luis Schiappa Pietra. Desde este jueves, ese delito dejó de ser "tentativa" y pasó a ser homicidio agravado.