El pasado domingo Johana Romero presentó un fuerte golpe en el brazo derecho y dijo haberse golpeado con una heladera. Preocupados, sus padres llamaron al Sies y desde entonces la joven de 30 años pasó por los hospitales Eva Perón, Alberdi y Provincial, donde finalmente perdió la vida.

Con el correr de los días creció la infección en el brazo y la versión de los hechos cambió. Según contó la familia, Johana le dijo a la madre que había sido atacada por su pareja, de 44 años.

El martes, Johana murió de un paro cardíaco producido por una asepsia por infección generalizada en el brazo.

Al caso lo lleva el fiscal Maximiliano Nicosia Herrero de San Lorenzo, ya que Johana, madre de dos nenas de 5 y 7 años, vivía en Capitán Bermúdez, en el mismo pasillo que su pareja. Él fue detenido, y se encuentra alojado en la Comisaría de Baigorria.

Según indicaron desde la Fiscalía “no se constataron hematomas, traumatismos por golpes o fracturas, y no hay indicio de golpes anteriores” en el cuerpo de la joven, y la autopsia en el Instituto Médico Legal llevará hasta 72 horas. De su resultado dependerá que el fiscal decida caratular la causa como un femicidio o no.

Antecedentes e irregularidades 

Según el MPA, el presunto agresor identificado como F.G. “no cuenta con antecedentes y no hay denuncia previa de violencia de género con la fallecida”. Sin embargo, una fuente del Área de Género de la Municipalidad de Baigorria que entrevistó al padre de Johana confirmó a Rosarioplus.com que “una ex pareja lo denunció por maltratos el año pasado”.

La fuente consultada por este medio destacó que en el momento en que Johana ingresaba al Hospital Eva Perón, a las 15 del martes, su padre Alberto Romero dejaba un audio en el servicio de mensajería que posee el área. Allí afirmó: “Si este número ayuda en casos que después terminan en femicidio, necesito que me ayuden”.

Además del panorama poco claro sobre la circunstancia en que la joven murió, desde el Área de Género de Baigorria resaltaron: “Preocupa que hubo en las horas claves antes de su muerte, cierta incompetencia en el proceso, ya que la sumariante de turno de la Comisaría de Baigorria recibió el alerta desde nuestra Área y prefirió no acercarse al nosocomio por ‘haber infectados de covid 19 y porque tenía varios casos por lo que no se podía ir’”.

La empleada municipal que dialogó con el padre de la joven fallecida recordó que él le aseguró que su hija “tenía dificultad para respirar, que tenía golpes en el pecho y el brazo, y fue entonces que llamamos a la Comisaría. También dijo que en el barrio era vox populi que él la golpeaba, se escuchaban gritos en el pasillo donde vive la familia”.

La denuncia finalmente fue tomada cuando la mujer murió.