La niña de cinco años que el domingo pasado recibió un disparo mientras estaba con su mamá en un comercio del barrio Toba murió esta madrugada de viernes en el Hospital Víctor J. Vilela. De los autores de aquellos balazos, hay un adolescente de 17 años que fue detenido como sospechoso de haber participado del ataque.

El ataque sobrevino el domingo, en un pequeño almacén de calle 1836 al 4300, en el extremo sudoeste de la ciudad, cuando dos hombres a bordo de una moto pasaron y abrieron fuego sin detenerse. Las balas, dirigidas a ciegas contra el comercio, hirieron a Dulce, la niña, en la cabeza, y a su madre en un brazo. 

La información oficial atribuyó como una hipótesis del ataque una rivalidad entre familias del barrio.

La pesquisa está a cargo del fiscal de Homicidios, Adrián Spelta.