El gobernador Gerardo Morales le dio este domingo la primera victoria electoral al gobierno de Mauricio Macri, al ser reelecto en Jujuy con el 45 % de los votos, una ventaja de casi 15 puntos sobre Julio Ferreya, el candidato de un sector del peronismo que compitió en esta elección con una fragmentación inédita.

El triunfo posiciona mejor al radical en el escenario interno de la coalición gobernante a nivel nacional, al punto de que ya avisó que viajará a Buenos Aires esta semana en un intento por influir en el armado de alianzas y conseguir ampliar Cambiemos hacia sectores del peronismo no kirchnerista, como el espacio de Roberto Lavagna.

Después de doce derrotas a manos de los oficialismos provinciales, Cambiemos celebró este domingo por la noche el triunfo del frente Cambia Jujuy, que gobierna la provincia desde 2015 cuando desterró al peronismo y colocó al primer gobernador radical en casi 60 años.

El gobernador que llegó al poder encabezando una fuerte cruzada contra la corrupción y el clientelismo del kirchnerismo de Jujuy representaban el ex mandatario Eduardo Fellner y la detenida ex jefa de la organización Tupac Amaru Milagro Sala, consolidó con esta victoria su liderazgo en la provincia al asegurarse también un buen número de bancas en la Legislatura.

También contó como propio el triunfo de su aliado el intendente de San Salvador, capital del distrito, el radical Raúl Jorge.

Si bien las elecciones legislativas de la provincia de Corrientes del fin de semana pasado le habían dado un triunfo a Cambiemos, esta es la primera elección a gobernador en la que se impone la coalición oficialista.

Más allá de que desde la provincia y el Gobierno nacional intentaban minimizar el alcance nacional de la elección, lo cierto es que fuentes de ambos sectores admiten que el significado político de la victoria de Morales le suma puntos a la administración del presidente Macri en su búsqueda de la reelección.

La fragmentación del peronismo jujeño, sumada a las denuncias de supuestas compra y venta de candidaturas en las listas del PJ que involucró al propio candidato del peronismo Julio Ferreyra, beneficiaron también al frente oficialista.

La representación del kirchnerismo en Jujuy fue casi inexistente después del alejamiento de la vida política local de Fellner, aquejado por problemas de salud pero también por las denuncias en su contra, y la detención de Sala, condenada por corrupción con fondos públicos.

Los seguidores de ambos se agruparon, no obstante, tras la candidatura de Paula Álvarez Carrera, una de las abogadas de Milagro Sala, quien llevó el sello del frente Unidad Ciudadana y otros, en menor cantidad, optaron por apoyar la fórmula de Ferreyra.

En la mayor dispersión que registró del total de elecciones que hubo a lo largo del año en todo el país, el peronismo anotó también a otras alianzas electorales como el Frente Patriótico, con Alejandra Cejas, ligado al sector del peronismo que responde a Guillermo Jenefes, que tuvieron desempeños menores.

Una buena elección hizo el candidato del Frente de Izquierda en la provincia, Alejandro Vilca, quien se aseguraba el cuarto puesto.

La afluencia de votantes alcanzó el 75 % del padrón, una cifra menor a la de comicios de los últimos cuatro años en los que se superó el 80 %.