Una multitud se movilizó este martes y protestó contra el tarifazo frente a la sede local del Ente Nacional de Regulación de Gas (Enargas) en Corrientes al 500. Los manifestantes formaban parte de la Multisectorial Rosario contra la reforma laboral 21F: entre sus integrantes hay gremios locales y organizaciones sociales y políticas.

“De todos los aumentos, el del gas fue el peor y ahora es la época de mayor consumo por el frío", remarcó Nicolás Del Mastro a Rosarioplus.com, quien integra La Alameda, una de las organizaciones que fundaron la Multisectorial 21F. "Esta marcha demuestra cómo si las organizaciones nos aunamos desde la periferia, tendremos más fuerza en el reclamo”, apuntó. 

El diagnóstico de la marcha fue más que positivo para los organizadores. El delegado de la UOM Rosario, Antonio Donello, se mostró “muy contento de que la gente vaya tomando conciencia de lo que le afecta el tarifazo", y celebró "que el reclamo no viene de un solo sector, sino de la gente común”.

Participaron además miembros de la CGT, CTEP, Movimiento Evita, Amsafé, UOM, Corriente Clasista y Combativa, Camioneros, La Bancaria, Recolectores, y Dragado y Balizamiento, así como la Multisectorial contra los tarifazos.

Fueron muchos los movilizados. “Los camioneros, que caminaron desde Corrientes y La Paz, eran unos mil, desde la CCC, otros 500 vinieron por calle San Lorenzo, y desde Movimiento Evita y la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular, arribaron con el resto desde la plaza Montenegro", estimó Del Mastro.

El dirigente analizó que “el movimiento obrero viene confluyendo en el diálogo intersindical a pesar de ser facciones disímiles, y por eso se ha marchado ya en Mar del Plata, Salta, ahora Rosario y próximamente en Santa Fe”. 

En el acto, se leyeron consignas y el diagnóstico que la Multisectorial 21F realiza: "Las medidas de ajuste con devaluación, aumento desproporcionado de las tarifas, caída de empleo, pérdida del poder adquisitivo y endeudamiento van de la mano del cierre de fábricas, empresas, servicios y comercios, destrucción de economías regionales y deterioro del mercado interno, generada por una espiral inflacionaria, paritarias con inaceptables condicionamientos, reducción del consumo, achique de salarios y jubilaciones".

Lo que se busca, aseguraron, es "enriquecer a sectores amigos del poder, como las mineras, el juego y las finanzas, beneficiados por la quita de retenciones y la desregulación de sus actividades". Promovieron en el documento la necesidad de “políticas para orientar las inversiones a favor de la producción, la generación de empleo, y mejora de calidad de vida”.

Finalmente, en el texto conjunto rechazaron “el aumento desproporcionado de tarifas, la degradación de las condiciones laborales, y la vuelta al sometimiento al FMI, los fondos buitres y las políticas económicas inescrupulosas”.