Por tercer año consecutivo el acto por el Día de la Bandera promete ser una jornada fría, no sólo por la coincidencia con el invierno sino por la organización que buscará resguardar la investidura presidencial ante posibles reclamos. Es que será la primera aparición pública del presidente en un acto masivo, luego de semanas de turbulencia económica y cambios importantes en su gabinete.

El gobierno no quiere enfrentarse a un mal momento por lo que volvió a imponer dos elementos de contención, ya clásicos de su gestión: fuerte presencia policial y vallado de varias cuadras que impedirá el acceso del público. El objetivo del cercado es contener a organizaciones sociales que ya anunciaron llevar sus críticas con ruido al presidente como por ejemplo la Multisectorial contra el Tarifazo.

“Vamos a juntarnos en Córdoba y San Martín y avanzar hasta donde podamos. El Monumento es de todos. No al veto de la ley al tarifazo, no a la reforma previsional, laboral y no al FMI”, explicó Juan José Sisca dirigente de la Multisectorial.  

Para colmo el anfitrión, Miguel Lifschitz, criticó este lunes al gobierno nacional en la jura de lealtad a la bandera de alumnos rosarinos. “Creo que se ve a un gobierno que le resulta difícil tomar la corrida cambiaria y la situación inflacionaria como la que se está dando en Argentina", disparó cuando el sol empezaba a calentar el Monumento a la Bandera.

El año pasado el rostro de Macri demostraba incomodidad al lado del gobernador, y quizás esta oportunidad no sea la excepción. Incluso trascendió que volverá a ser un discurso breve de no más de cinco minutos.

Antecedentes

Vale recordar que la estricta disposición del espacio público impidió la realización del tradicional desfile cívico, como también la participación de ciudadanos, algo que generó críticas desde la Provincia y la Municipalidad.

Incluso el operativo de seguridad generó inconvenientes entre los manifestantes y el fuerte cordón policial que no dudó en repartir cachiporrazos. A pocos metros de los globos y el "Sí, se puede", el concejal justicialista Eduardo Toniolli (FpV-PJ), fue agredido por agentes de Gendarmería mientras participaba de la manifestación contra el tarifazo.