El presidente Mauricio Macri volvió a utilizar la arenga y el enojo como recurso discursivo y afirmó, en la reunión de Gabinete Ampliado que se realizó en el Centro Cultural Kirchner, que "hay que remar un poco más, sin llorarla".

"Estoy caliente, siempre me calentó la mentira, y otra vez vuelvo a escuchar a los que vienen a proponer ese atajo, esa solución mágica que nos releva de seguir este camino de trepar la montaña con orgullo, con esfuerzo". "¡Es inaguantable, no lo puedo soportar!", indicó el mandatario.

Además, el líder del Pro hizo referencia a los dichos del ex ministro de Economía Roberto Lavagna: "Escucho que algunos dicen que esto se arregla creciendo, ¡¿quién no quiere crecer, quién no quiere crecer?!". "Pare crecer, primero tenemos que hacer cosas de base", dijo.

"No es verdad que estamos condenados al fracaso persistente o que no podemos cambiar la historia", apuntó.

"Por acá todos vamos al futuro, por acá sus hijos van a tener mejor oportunidades que las que tuvieron ustedes, por acá todos vamos a sentirnos incluidos, parte, vitales, fuertes, entusiasmados. Pero claramente hay que poner el hombro, hay que remar un poco más porque de todo lo que se heredó no se sale de un día para el otro, sin llorarla, pero convencidos de que estamos en el lugar correcto, en la hora indicada, porque somos la generación que vino a cambiar la historia para siempre", concluyó Macri.