El principal exportador de dulce de leche del país abrió su espectro a un mercado muy distinto de las costumbres, gustos y cultura argentina. Se envió el primer cargamento de ese producto desde Santa Fe a Japón, y se ilusiona con que el gusto particular los fascine.

En realidad ya hay un antecedente que une a la tradición argentina y que llamó la atención: el tango. Japón es un país donde el género y su baile pegó muy fuerte, incluso compiten a nivel internacional.

En total, la empresa San Ignacio exportó tres pallets que contenían 105 cajas de 12 frascos de vidrio cada una: un total de 3.780 frascos, con 1701 kilos netos. Las principales ciudades en las que se podrá comprar el dulce de leche son Tokio, Yokohama, Osaka y Kobe; se podrá conseguir en supermercados y retailers que comercializan productos importados.

En la actualidad, las exportaciones argentinas de dulce de leche representan 4% de la producción anual del país y de ese volumen, esta empresa representa el 40%, según publica iProfesional.