El gobernador Miguel Lifschitz reveló este miércoles que lo entusiasma la idea de ser diputado provincial para “participar del debate de la reforma constitucional” aunque no confirmó si será candidato. Los dichos despertaron el malestar de la oposición.

Puntualmente el legislador Luis Rubeo acusó al mandatario de “querer realizar mediciones electoralistas disfrazadas en una consulta popular”.  En diciembre pasado, pocos días antes del fin de año, Lifschitz firmó el decreto para que Santa Fe tenga una consulta de carácter voluntario y no vinculante sobre los cambios en la Carta Magna.

El diputado peronista sentenció que “el gobernador debería enviar el mensaje a extraordinarias como se lo venimos planteando desde el año pasado”, al tiempo que opinó que antes de pensar en la reforma bueno sería ocuparse de otros temas que hacen a la cotidianeidad de los santafesinos.

“Debería ocuparse de la preocupante situación de su provincia, cuya industria demuestra en lo que va del año, según datos aportados por el Indec una caída del 3,8 por ciento y una tendencia de achicamiento de la pequeña y mediana empresa realmente alarmante”, dijo Rubeo.

El legislador justicialista hizo referencia a los datos que los industriales compartieron recientemente, los cuales se mostraron fuertemente preocupados por la falta de respuestas que el gobierno santafesino implementa ante la creciente caída del sector que incluye una importante pérdida de puestos laborales, que sumados a la inflación, el aumento de tarifas y el movimiento del dólar prevén un panorama desalentador para el año que recién comienza.