El tercer paro general realizado a la gestión de Mauricio Macri comienza este lunes. En esta oportunidad el llamado desde de la Comisión General de Trabajadores (CGT) es a 36 horas de freno a la actividad laboral, empezando el lunes a las 12 horas y finalizando a las 00 horas del miércoles. Un día y medio de protesta en donde habrá movilizaciones y la ciudad se presentará parada en varios rubros.

El paro de la CGT cuenta con adhesión de las dos CTA, por lo que se espera que la medida de fuerza tenga alta adhesión en el sur santafesino donde no habrá clases ni circulación del transporte. Tampoco atención bancaria ni actividad comercial. Además habrán dos movilizaciones, lunes y martes.

El lunes la actividad en la ciudad estará frenada. Es que por el paro directmanete no habrá atención en oficinas del Estado. Sumado a esto, tampoco abrirán comercios ni shoppings por que estarán celebrando el Día del Empleado de Comercio, que si bien es el 26 de septiembre, la Asociación de Empleados de Comercio (AEC) acordó moverlo al lunes 24.

También habrá manifestaciones en el primer día de la semana. Es que la CTA que responde a Pablo Micheli arrancará las 36 horas de paro con una movilizará a las 10.30 de la mañana en plaza 25 de Mayo. Desde Coad, el gremio que nuclea a docentes universitarios, llamaron a concentrarse en Plaza San Martín a las 12 horas a la espera de la llegada de CTA-A, ATE, SIPRUS, AMSAFE Rosario, CTEP, FOL, CCC, Pueblos Originarios, Barrios de Pie, gremios de la CGT como Dragado y Valizamiento, Aceiteros, Recolección y Barrido, entre otras organizaciones.

En tanto, la CTA que responde a Yasky, el Movimiento Sindical Rosario y el Movimiento Obrero Santafesino si bien también comenzarán el paro el lunes al medio día, movilizarán recién el martes 25 desde las 10. La concentración es en San Lorenzo y Corrientes y el acto central en el cruce de las peatonales Córdoba y San Martín. También Coad se plegará a esta movilización.

Será el único movimiento que presente el centro en este día. Es que para el martes la quietud se incrementa y a la no apertura de oficinas estatales ni comercios -esta vez sí por adhesión a la medida de fuerza-, se le suman escuelas públicas y privadas que permanecerán cerradas. Tampoco habrá clases en las casas de estudio de la UNR y los bancos permanecerán cerrados.

En cuanto al transporte, no circularán colectivos urbanos y el servicio de taxis será reducido. Las cabinas de peajes permanecerán levantadas. Salir en auto, sólo si se cuenta con el combustible necesario para volver a casa, ya que tampoco habrá expendio de combustibles.

Tampoco habrá recolección de residuos y en hospitales y sanatorios se realizarán guardias mínimas. En cuanto a la actividad privada, bares y restaurantes funcionarán sólo atendidos por sus dueños. Pero el café habrá que tomarlo sin el matutino, ya que no habrá diarios. Los trabajadores de prensa harán guardias mínimas en radios, televisión y diarios digitales con el fin de darle cobertura a la medida de fuerza.

Así las cosas, la ciudad no retomará su ritmo habitual hasta el miércoles cuando el transporte vuelva a circular, los chicos retomen las clases y la actividad comercia vuelva a abrir sus puertas.