El amanecer de este miércoles trajo complicaciones para unos 350 rosarinos y turistas que tenían planeado despegar o arribar en el aeropuerto de Fisherton, debido a la densidad de la niebla y la llovizna de esas horas, que no garantizaba la distancia mínima de visibilidad para garantizar los vuelos.

Ocho fueron los programados que debieron cancelarse durante el correr de la mañana, seis de ellos de Aerolíneas Argentinas y dos de Avianca, para los cuales los pasajeros deberán averiguar con las empresas cómo reprogramar sus arribos y sus partidas. Eran vuelos a Salta, Aeroparque y Bariloche.

Ya entrado el mediodía la visibilidad se normalizó, y un vuelo de Latam hacia Santiago de Chile despegó con normalidad. 

Un vuelo de Copa que partía hacia Panamá a la 1 y media de la madrugada fue reprogramado (el avión que arribaba fue derivado a Ezeiza), y los pasajeros que esperaban por él quedaron varados en Rosario hasta esta tarde de miércoles, a las 18.30. "Cada aerolínea determina si considera que las condiciones de visibilidad mínima están garantizadas –que es de 800 metros en el despegue y de 1200 en el aterrizaje-, y en ese caso, el viaje se realiza como el que partió a Lima, se cancela o se reprograma”, explicó a Rosarioplus.com la vocera del Aeropuerto Internacional de Rosario, Cecilia Gabenara.

Para el mediodía, se estableció que la visibilidad ya era buena (4 mil metros), pero “la mañana fue tan complicada que afectó a toda la programación", agregó la portavoz.

El AIR cuenta con una grilla actualizada sobre cada vuelo en su sitio web oficial, pero de todas formas “cada pasajero debe chequear en su correo electrónico las modificaciones que haga la aerolínea contratada, ya que se manejan por mailing, o en todo caso hacer un llamado a la misma aerolínea”, aclaró.