El fiscal de Homicidios Ademar Bianchini investiga la muerte a balazos de un matrimonio de ancianos, propietario de una tradicional casa de fotografía en la zona oeste. La hipótesis más comentada este martes por la tarde, cuando se descubrieron los cuerpos de las víctimas, fue la de un femicidio seguido de suicidio. Sin embargo, eso lo determinarán los peritajes criminalísticos. Mientras tanto, el fiscal no descarta la posibilidad de que haya sido un doble crimen.

A Bianchini le avisó la policía a las 18.30. Un rato antes, Luciano Valenti había ido a visitar a sus padres, en la casa de siempre, en Ecuador 365. Y al ingresar se encontró con el cuerpo de su padre, Juan Domingo Valenti, de 72 años, en el suelo del comedor, sobre un charco de sangre y con una pistola calibre 22 en la mano. Tenía dos heridas de bala en el pecho. En la entrada del dormitorio estaba su madre, Elsa Beatriz Álvarez, de la misma edad. Tenía las huellas de dos disparos en el cuello y en la cabeza. 

Lo que abona la teoría de que el hombre hubiera dado muerte a su esposa y luego haberse quitado la vida es el hecho de que no había puertas ni ventanas violentadas, como tampoco que faltara nada de valor en la casa. De todos modos, el hecho de que Valenti tuviera dos heridas de bala también obliga a revisar la teoría de su suicidio.

Según el portavoz de Fiscalía, la muerte de ambos cónyuges ocurrió el martes al mediodía. Los cuerpos iban a ser sometidos a autopsia y exámenes criminalísticos.

Valenti tenía una casa de servicios fotográficos, impresión y revelado tradicional en Eva Perón al 7000, a una cuadra y media de su domicilio.