La jueza penal Valeria Pedrana imputó este martes al ex jefe de Policía de Rosario Marcelo Gómez, por incumplimiento de deberes de funcionario público: la acusación alude a la decisión de ordenar el retiro de la custodia de los edificios del Centro de Justicia Penal, Colegio de Jueces y el Ministerio Público de la Acusación durante diciembre, a pesar de que eran –y siguen siendo– blancos constantes de balaceras mafiosas. 

La fiscal Paola Aguirre, de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos, imputó al ex titular de la Unidad Regional II por ordenarle, el pasado 13 de diciembre, al jefe de la Agrupación Cuerpos de la Unidad II que retirara las custodias de los edificios del Centro de Justicia Penal, Colegio de Jueces y el Ministerio Público de la Acusación. Según Gómez, el personal que resguardaba los edificios públicos iba a ser reasignado para cubrir otro servicio, y de esa manera, el jefe policial desobedeció la orden vigente desde el 4 de agosto de 2018, que garantizaba la custodia de los inmuebles oficiales por parte de personal de la fuerza de seguridad.

En la audiencia que se realizó este martes en sala 3 de la Oficina de Gestión Judicial del Centro de Justicia Penal de Rosario, la fiscal Aguirre solicitó que el imputado no pueda salir del país ni la provincia. Pero la jueza Pedrana rechazó ese pedido. En cambio, obligó a Gómez a fijar domicilio y a notificar con antelación a la Oficina de Gestión Judicial en caso de que vaya a viajar a otra localidad, o al exterior, incluso. 

Gómez había sido ascendido a la jefatura de la UR II el 11 de diciembre por el gobierno recién asumido de Omar Perotti. Pero tras un cortocircuito con el ministro de Seguridad, Marcelo Sain, dos días más tarde presentó su renuncia, al igual que otros dos titulares de otras Unidades Regionales. En aquel momento, salió a la luz un audio de WhatsApp en el que el ministro Saín le recriminaba a Gómez haber sacado la guardia de los establecimientos oficiales.

“Director Gómez, habla Marcelo Saín, ministro de Seguridad. Le ordeno por este medio que restituya de manera inmediata el servicio de custodia de edificios públicos en una hora”, manifestó el ex legislador porteño en el mensaje. Además, Sain le advirtió a Gómez que, si no cumplía con este pedido en tiempo y forma, al otro día iba a ser “denunciado por incumplimiento de los deberes de funcionario público”. Y si llegaba a ocurrir algo en este tiempo, las consecuencias para él serían "más graves desde el punto de vista penal”.

“De lo contrario, voy a ir para allá y la cosa se va a poner picante”, agregó quien fue también interventor de la Policía de Seguridad Aeroportuaria. Por su parte, el entonces titular de la Unidad Regional II (UR II) se limitó a responder: “Buenas noches ministro. Ya está reestablecido”.