La discusión por los subsidios al Transporte Urbano de Pasajeros (TUP) está en un punto álgido, sobre todo porque la Municipalidad de Rosario debe pagar los sueldos a los choferes con el aumento correspondiente y no sabe con certeza si lo podrá hacer, o al menos de qué manera. En este marco surgió la posibilidad de aumentar un peso el boleto, opción que la intendenta Mónica Fein desechó.

“No voy a mandar al Concejo ningún aumento de tarifa. Mandaremos un informe al Concejo con la información que necesiten porque nos han pedido”, afirmó frente a la prensa y reveló que espera una reunión con el ministro de Transporte de Nación, Guillermo Dietrich. Si se concreta, se comprometió a invitar a los presidentes de bloque del Concejo.

Las declaraciones de la mandataria apuntaron a la responsabilidad del gobierno nacional sobre los subsidios sobre todo cuando fue consultada acerca de la negativa de la administración provincial de aportar una partida extra. “Cuando cargamos combustibles aportamos un impuesto a un fondo nacional que se distribuye en los subsidios al transporte. Claramente es una responsabilidad nacional (...) que ha decidido el año pasado disminuir los subsidios al gas oil, y este año retirarse prácticamente del salario de los choferes”.

Por otra parte explicó que Rosario recibe menos de lo que contribuye al sistema. “Nosotros aportamos un 8% del impuesto al combustible, y vuelve en forma de subsidio sólo un 4%. O sea que hay recursos que la ciudad puede reclamar”, dijo Fein.

Al ser consultada respecto a la posibilidad de cumplir con el pago de salarios a los choferes al estar desechada la opción del incremento en la tarifa para compensar el aumento, respondió: “Esperamos que sí. Entendemos que la paritaria firmada a nivel nacional no nos incluyó en el debate pero sí en la resolución. Veremos. Mandaremos el informe al Concejo y buscaremos soluciones en el dialogo con las empresas que deben absorber ese costo y con los choferes”.