A una semana de la muerte de Marcos Guenchul, el joven que fue baleado en la esquina de Sucre y Mendoza después de cerrar su gimnasio el pasado martes, se desconocen los móviles del crimen y el estado de la causa es incierto. Los familiares reclaman justicia al igual que todo el barrio y aunque respetan los tiempos de la investigación necesitan "una respuesta rápida".

Hasta el momento toda la investigación se mantiene en el máximo hermetismo, sin querer brindar hipótesis que puedan ser tomadas como ciertas y entorpecer el desempeño de la justicia. En diálogo con Rosarioplus.com los más cercanos a Marcos contaron cómo viven estos días que alternan entre la búsqueda de consuelo y el reclamo de respuestas.

Marcela Ontiveros, mamá de Marcos, aseguró que el joven "era un chico que proyectaba su vida siempre para adelante. Tenía su pareja con la que tenía muchos proyectos y una hija chiquita, Tiziana de tres años, de la que siempre estaba pendiente". 

"Si yo tendría que usar una palabra para definir a Marcos, esa sería movimiento. Movimiento y vida", describió para luego ejemplificar con una anécdota personal. "Yo hace un año tuve un ACV y él se interiorizó en lo que tenía para darme toda una serie de ejercicios para que yo pueda recuperar la movilidad. Siempre me estaba preguntando y exigiendo que camine, que me mueva", detalló. 

Es este modo de vivir de su hijo lo que impulsó a Marcela a tomar la decisión de donar sus órganos. "Él estaría feliz, porque él era vida y con sus órganos se habilitó la vida de otras personas. Y a mí me reconforta saber que su corazón sigue latiendo en otra persona que lo necesitaba", dijo la mamá.

Estos días que atraviesa "en el marco de un duelo muy profundo", se apoya en en el grupo cercano de su hijo. "Los chicos siempre están en casa, acompañándome", aseguró haciendo alusión a los amigos que tenía Marcos.

Uno de esos amigos que visitan a diario la casa de Marcela es Marcio Morán, quien respecto de cómo se maneja la causa aseguró que "no se quieren esbozar hipótesis, porque cualquier cosa que se diga se disemina muy rápido y entorpece la investigación".

"Nosotros necesitamos una respuesta rápida, porque somos muchos los que estamos sufriendo con no saber qué pasó, y para eso debemos dejar actuar a la justicia", explicó. 

En este sentido planteó que su interés y el de los familiares y amigos de Marcos es visibilizar el caso, por lo que se está pensando en una nueva marcha para los próximos días. "Nosotros queremos que se entienda esto como un problema de toda la sociedad, porque en la semana que pasó hubo nueve homicidios en la ciudad y si bien una parte de ellos responden a los patrones comunes que se suelen suceder el caso de Marcos es distinto y le puede pasar a cualquiera. Porque todos ellos responde al entramado de violencia en el que estamos viviendo", sentenció.