Mientras el Ministerio Público de la Acusación se prepara para realizar las primeras imputaciones relacionadas al siniestro vial que dejó 13 muertos y numerosos heridos, documentos oficiales a los que tuvo acceso Rosarioplus.com revelan que directivos de Monticas y Metropolitana (las dos empresas a las que se les revocaron sus permisos de circulación luego del choque) participan en la actualidad de los directorios de empresas de transporte de pasajeros que aún operan en territorio santafesino.

En su momento, el anuncio de dejar “fuera de juego” a las compañías parecía llevar tranquilidad a los usuarios de interurbanos, cansados de los deficientes servicios y conmocionados lógicamente luego de la tragedia. Pero ahora se conoce que quienes estuvieron encargados de manejar los destinos de estas empresas aún siguen tomando decisiones en, al menos, otras siete firmas que cumplen recorridos a lo largo de toda la provincia: Expreso Arito, Empresa Argentina, Empresa de Transporte El Norte, Central Argentino de Rosario, Central Alcorta, Empresa San Cristóbal y Nueva Empresa Ciudad de Esperanza.

Consultado al respecto, el subsecretario de Transporte de Santa Fe Héctor Zanda minimizó la situación y sostuvo que es algo que también sucede a nivel nacional. “En el país son dos o tres las grandes empresas que nuclean a casi todas las pequeñas que hacen recorridos más provinciales”, señaló.

De todos modos, el funcionario reconoció que, tras el siniestro vial, decidieron hacer auditorías técnicas sobre algunas empresas, principalmente sobre las que están relacionadas al grupo Derudder SRL. “Hemos profundizado los controles, durante 2017 se inspeccionaron un 50% más de colectivos que durante 2016 y los resultados fueron positivos”, remarcó Zanda.

Entre las empresas que forman parte del grupo Derudder, se destaca Expreso Arito, compañía que, supuestamente, competía con Monticas en el corredor de la ruta 33 pero que en los papeles tiene prácticamente el mismo directorio que la empresa de los micros color naranja. Según el Boletín Oficial de la provincia, el presidente de Arito es David Alejandro Luppi, el mismo que Monticas y Metropolitana, mientras que el vicepresidente de la empresa, Dino Francisco Paccot, ocupa un lugar suplente en el directorio de Metropolitana y también es el el segundo al mando de Empresa Argentina, otro de los caballitos de batalla del grupo Derudder, que también opera a nivel nacional.

Pero el entramado de nombres y empresas no termina ahí. En los documentos oficiales, el nombre de David Alejandro Luppi aparece también relacionado con la Empresa Las Rosas, otra que competía contra Monticas, en este caso, en el recorrido interurbano entre Rosario y Funes. A mediados de 2017 la empresa dejó de prestar servicio y fue reemplazada por otra compañía. 

Al momento del choque frontal, este empresario de 45 años también presidía Empresa Argentina, cargo al que había llegado tras una larga trayectoria en el grupo de los hermanos oriundos de Entre Ríos. Pero a menos de dos meses del siniestro, el directorio de Empresa Argentina cambió y Luppi dejó de tener participación en el mismo.

Otro de los nombres que se repiten en las empresas de los Derudder es el de Juan Antonio Ciri, un experimentado comerciante que aparece en la órbita provincial del grupo en abril de 2008 cuando se convirtió en uno de los directores de Monticas. Ciri estuvo en ese cargo en simultáneo con el de secretario de directorio de Empresa Argentina. En 2015, Ciri ingresó a la mesa chica de Expreso Arito, puesto al que también lo habían ascendido en Empresa Argentina.

Pero hay más: Ciri siguió ganando puestos en las empresas de los Derudder y ese mismo año se ubicó como suplente en los directorios de Metropolitana y Las Rosas. Según los datos del Registro Público de Comercio y el Boletín Oficial de la provincia, tras el accidente Ciri no fue removido de ninguna de sus funciones en esas empresas.

Los Derudder y el fantasma del monopolio

En esta danza de nombres y directorios, los Derudder no se quedan afuera. Pese a que siempre cultivaron un perfil bajo ante los medios, tras el siniestro vial el apellido Derudder se filtró no sólo en las páginas de los diarios, sino que también en las fojas judiciales dado que Luis Alberto, el menor de la dinastía, figura como suplente dentro del directorio de la empresa Metropolitana.

Desde la Cámara de Empresarios de Transporte Multimodal de Pasajeros de Santa Fe (Cetramp) explicaron que Luis es quién tiene una presencia más activa en el manejo de las empresas de la familia dentro de Santa Fe. De hecho, es el único de los hermanos al que los directivos vieron en persona, justamente unas semanas después de la tragedia que tuvo como partícipes a dos de las compañías de su propiedad.

“A las que somos independientes no nos gusta ver frente nosotros a una empresa cada vez más grande”, admitió Saúl Issakson, integrante de la Cetramp y titular de la empresa Tata Rápido. El empresario relativizó que se trate de una situación de monopolio, dado de que las tarifas no se rigen por el libre mercado, sino que tienen una regulación estatal. “Desde el momento que el Estado define los precios de los servicios, es imposible que exista una competencia desleal, pero el riesgo del monopolio está siempre presente, por ahora vemos una concentración muy importante”, advirtió Issakson.

El titular de Tata Rápido sufrió en carne propia el intento de asfixia de su firma mediante competencia desleal con una de las empresas de los dueños del grupo Flechabus. “Ellos tienen empresa San José, que usa el nombre de fantasía Rápido Tata y en un momento intentaron competir con nosotros bajando la tarifa a un precio menor al del mercado, trabajando a pérdida para asfixiarnos económicamente. Por suerte, la provincia intervino y los obligó a modificar el precio y luego hubo un fallo de la Corte Suprema que les impidió seguir trabajando sobre este corredor porque nunca habían tramitado la autorización para hacerlo”, recordó el empresario.

Pero la presencia de los Derudder en las empresas que operan dentro de la provincia no se termina ahí, según el Boletín Oficial Luis preside la empresa Central Argentino de Rosario y también tiene participación en Central Alcorta, Transporte El Norte, San Cristóbal y Las Rosas.

Por su parte, Raúl Hugo Derudder, el mayor de los hermanos, también integra los directorios de algunas de las empresas que operan en Santa Fe, al igual que Guillermo Diego, el otro hermano. “Sabemos que los dueños de Monticas tienen participación accionaria en otras compañías y es por eso que decidimos realizar algunas auditorias mecánicas para constatar que los vehículos se encuentran en buen estado y los resultados fueron positivos”, indicó Zanda.

Al mismo tiempo, el encargado de controlar a las empresas de transporte de pasajeros de la provincia tras el desplazamiento de Gustavo Peirano de ese cargo, explicó que no todas las empresas que se relacionan al grupo Derudder son de propiedad total de ellos. “En algunas empresas compran una parte del capital accionario y se mantienen como socios minoritarios y en otras se hacen con el 50% de la empresa”, detalló.

Un dato relevante en los documentos a los que tuvo acceso Rosarioplus.com marca que, a menos de dos meses de perder la licencias de Monticas y Metropolitana para circular por las rutas provinciales y nacionales, fue el propio Raúl el que se encargó de adquirir una flamante empresa de transportes para el grupo, se trata de NECE SRL, la Nueva Empresa Ciudad de Esperanza que se encarga de transportar pasajeros desde la capital provincial hacia el norte.

Horizonte: más controles y una nueva ley

Luego de asumir en su cargo, Zanda diagramó en conjunto con el gobernador Miguel Lifschitz un plan de trabajo basado en diez puntos entre los que se destaca el aumento de los controles por parte de la provincia hacia las empresas de transporte de pasajeros. “Durante el 2017 incrementamos un 50% las inspecciones con respecto al 2016 y desde enero de este año se sumaron 10 nuevos inspectores que van a estar distribuidos de forma rotativa por todas las rutas de la provincia para profundizar aún más el control”, explicó.

"Le dimos prioridad al control del transporte de pasajeros, porque nosotros también estamos encargados de controlar los transportes de cargas. Al mismo tiempo, firmamos convenios de cooperación con distintas ciudades y comunas para que ellos también tengan la potestad de poder inspeccionar los colectivos”, sostuvo el actual Subsecretario.

Entre las deudas pendientes que Zanda remarca, está la nueva ley de Transporte de la provincia de Santa Fe, proyecto que ya fue elevado a la Cámara de Diputados y que esperan que pronto se comience a debatir. “La normativa vigente es de 1935, necesitamos una ley mucho más moderna, adaptada a las actuales necesidades, donde se le reconozcan los derechos a los usuarios y también las obligaciones a los prestadores, y que marque algunos indicadores de calidad del servicio”, detalló Zanda.

Por su parte, desde la Cetramp, Issakson se mostró de acuerdo con la necesidad de que se sancione una nueva ley de transporte y pidió que en el armado de esa normativa se busque proteger a las pequeñas empresas. “Lo que le pedimos a la provincia, es que si la ley que presentaron abre nuevas licitaciones, no permita que la concentración de empresas se sigan dando, es decir, a las pocas empresas familiares que aún subsistimos que nos cuiden. Esto mismo se lo plantemos al gobernador y se comprometió a tenerlo en cuenta”, se esperanzó.