Todavía le faltaba un largo tramo para llegar a la ciudad de Santa Fe al jefe de la delegación Santa Fe de la Policía Federal Argentina (PFA), Mariano Valdés, y a la suboficial que lo acompañaba. Según la versión que transmitió un vocero del Ministerio Público de la Acusación, cerca de las 21 de este lunes, el jefe policial detuvo la marcha del Ford Focus que conducía (sin ninguna identificación visible de la fuerza) sobre la banquina de la autopista, a la altura de Fighiera, para cambiar la yerba del mate y luego continuar, pero el rumbo cambió dramáticamente en segundos.

Una camioneta negra frenó de golpe y tres hombres con pasamontañas comenzaron a disparar contra el vehículo, según detalló el portavoz de la Fiscalía. Las balas ingresaron en su mayoría por la ventanilla del conductor. Valdés supuestamente estaba en el interior del auto. Curiosamente, en esas circunstancias recibió un balazo en la ingle y otro en un brazo, pero no en la cabeza o en el tórax, tal como podría deducirse de los impactos que perforaron el cristal de la ventanilla.

El comisario devolvió el fuego, y posiblemente uno de los agresores haya resultado herido, por lo que los atacantes se subieron a la camioneta y fugaron. La víctima y su acompañante condujeron hasta la estación de servicio YPF cercana, dónde solicitaron asistencia.

La declaración de Valdés y la suboficial que lo acompañaba, que salió ilesa del atentado, será clave para determinar las circunstancias y motivaciones del hecho.

Según la ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich, podría ser producto de la exoneración de la cúpula de la delegación Santa Fe a la que Valdés reemplazó en mayo pasado, por presunta connivencia con narcotraficantes de la capital provincial.