Crisis y ajuste son dos palabras abstractas. Sus efectos, sin embargo, son tangibles y concretos. Ana Migliónico es la directora de Alas, un emblemático Centro de Día que desde hace más de 30 años atiende a personas con distintos tipos de discapacidades. La institución --ubicada en calle Alvear al 300-- está al borde del cierre. Tienen fondos y recursos para cubrir su funcionamiento hasta noviembre. Hace desde febrero que no cobran las partidas del Programa Incluir Salud, del que dependen el 80% de los pacientes. 

Rosarioplus.com contó esta martes que Nación incumplió con su promesa de ponerse al día con la abultada deuda que mantiene con toda la cadena de prestadores de este programa, creado en 2011 con el fin de garantizar el acceso a los servicios de salud a los titulares de las pensiones no contributivas. A fines de septiembre, en medio de marchas y movilizaciones, la Casa Rosada se comprometió a saldar las deudas hasta junio y restablecer así una cadena habitual de pago de 90 días. 

Pero las palabras, otra vez, se las llevó el viento. En Santa Fe, la mayoría de las instituciones tienen atrasos de entre 150 y 210 días, como el caso de Alas que no recibe ninguna transferencia desde febrero. Tan desesperante es la situación, que el mes pasado las autoridades enviaron una carta a los familiares de los pacientes (29, en la actualidad) y a todo el equipo terapéutico (30 trabajadores) por las serias dificultades para afrontar "los gastos de funcionamientos y el pago de los honorarios". 

 "Actualmente contamos con fondos para cubrir el funcionamiento hasta el mes de noviembre inclusive, y de no reactivarse nuevamente la cadena de cobros, no contamos con los recursos necesarios para funcionar a partir del mes de diciembre. Por lo expuesto nos declaramos en emergencia económica", explicaba el comunicado.   

Pasaron los días y el panorama, como era de esperar, se agravó al no recibir ninguna nueva transferencia. "Supuestamente hay una orden de pago cursado. Pero nadie nos confirma nada. No atienden los teléfonos ni contestan ningún correo. La incertidumbre es total", explicó Migliónico, quien reconoce sin titubear que la institución está al borde de la "crisis total". 

"Nos están empujando al cierre. Estamos haciendo todos las malabares financieros para no recortar ni afectar las prestaciones que ofrecemos. Ya suspendimos todas las actividades al aire libre. Pero los recursos que nos quedan son limitados. Nos resistimos a seguir ajustando, por eso necesitamos que se restablezcan los cobros", detalló la directora en diálogo con Rosarioplus.com.

A la deuda se le suma las dificultades diarias para afrontar gastos corrientes que se "fueron por las nubes", como los servicios o la materia prima para cocinar. El Centro Día entrega desayuno, almuerzo y merienda. Por la comida principal reciben partidas del Ministerio de Educación. Las dos colaciones, en cambio, corren por cuenta propia.

"Hasta el pan está carísimo. Todo aumentó una barbaridad en las últimas semanas. Ni hablar de las facturas de gas y luz. Hicimos un pedido para entrar en alguna tarifa diferencial porque no podemos pagar las boletas que desde hace un tiempo están llegando", agregó Migliónico. 

La institución le ofrece a sus pacientes una jornada doble con 20 talleres semanales. Los hay artísticos, recreativos y pre ocupacionales. Muchos jóvenes y adultos transformaron sus vidas gracias a estos espacios de aprendizajes y contención. El cierre de este lugar --como el de tantas otros vinculados al sistema de discapacidad-- "condenaría a los pacientes al encierro en sus casas, al olvido, a una vida sin derechos". 

"En todos estos años logramos un acceso universal, que el paciente con Osde reciba la misma calidad de atención que el paciente con la obra social que le proporciona el Estado. Esto está en riesgo. La inclusión social ha sido muy fuerte, le hemos cambiado la vida a muchos jóvenes. No podemos retroceder a este nivel. Es muy grave lo que está pasando", reflexionó la directora.     

Alas convocó a un encuentro con "representantes públicos" de la ciudad para "abrir un diálogo" que permita dimensionar el tenor de la problemática. La reunión se llevará a cabo el martes en el propio Centro de Día. "Ojalá encontremos alguna solución colectiva. Necesitamos de todos", pidió Migliónico.