Antonio Brisco es un rosarino que desde hace más de 30 años ejerce su derecho a votar aunque no tenga la obligación, porque tiene 101 años y 5 meses. Pero en estas Primarias no podrá hacerlo, ya que misteriosamente no figura en el padrón.

Esto lo confirmó su hija Graciela, de 62 años, quien en diálogo con Rosarioplus.com aseguró que “hasta 2015 votó normalmente, y siempre quiere votar, porque dice que los viejos también cuentan, y le importa que no haya corrupción, así como la situación de los trabajadores”.

Recordó que la última vez votaron distinto color político, y que incluso ella debió entrar al cuarto oscuro “porque se le complicó entender las boletas, por la cantidad de candidatos que eran”.

Según parece, el caso de Antonio no es el único, aunque no debería haber sido dado de baja en el padrón electoral, ya que “no hay una edad máxima para ejercer el derecho a voto, simplemente dejan de estar obligados a los 70 años”, explicaron fuentes del Tribunal Electoral.

Graciela supo que su padre no figuraba en el padrón cuando entró en el sitio oficial, y lo mismo hizo su sobrina. “Probé agregar datos, corregir el nombre, y nada”, recordó. Las personas sólo son quitadas del padrón cuando se emite el Acta de Defunción, y “aun así hay casos de personas fallecidas que siguen figurando”, aseguró el director provincial de Reforma Política y Constitucional del Gobierno de Santa Fe, Oscar Blando a Rosarioplus.com.

Antonio de chico trabajó en el campo. Vive por Pellegrini, cerca de su otra hija, pero durante casi toda su vida vivió en la zona sur de Rosario, y durante los últimos 35 años atravesaba la ciudad todos los días, primero en bicicleta, luego en moto y finalmente en el trolebús M hacia su trabajo en los molinos Minetti en el cruce Alberdi.

De allí, aun un compañero de trabajo vive, y se reúnen a compartir los cumpleaños y las tardes de vez en cuando, porque “ya se le fueron todos los otros”, aseguró su hija.

De todas formas, como se trata de elecciones primarias, Don Brisco tendrá tiempo, una vez que reabra el período de reclamos, para consultar en el Tribunal Electoral por su ausencia, para regularizarse nuevamente y poder participar de las elecciones generales de octubre.

“Si él quiere, vamos a hacer el reclamo para que pueda votar en octubre, porque él sigue firme con sus ideas y convicciones”, finalizó Graciela.