El juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, procesó este miércoles sin prisión preventiva al suspendido fiscal de Mercedes, Juan Ignacio Bidone, por presunta asociación ilícita y abuso de autoridad, y le trabó un embargo de 10 millones de pesos, en la causa que investiga una supuesta asociación ilícita dedicada a la extorsión y al espionaje ilegal. Así lo dispuso en una resolución dictada en este expediente, en el que se encuentra detenido el falso abogado Marcelo D'Alessio, y fue involucrado el fiscal Carlos Stornelli.

De esta forma, el fiscal Bidone -suspendido en su cargo desde el 20 de marzo pasado por un plazo de 90 días por decisión de la Suprema Corte de Justicia bonaerense- sumó su segundo procesamiento, dado que la semana pasada el juez federal Luis Rodríguez adoptó una medida similar en una causa en la que se investiga la presunta extorsión al empresario aduanero Gabriel Traficante.

En la resolución, a la que tuvo acceso Télam, el juez Ramos Padilla -cuya actuación en este expediente fue confirmada el lunes último por la Cámara Federal de Mar del Plata- dispuso el procesamiento sin prisión preventiva de Bidone "por encontrarlo 'prima facie' penalmente responsable del delito de asociación ilícita". 

Al fundamentar la medida, el magistrado describió a Bidone como "un fiscal provincial, con una reconocida trayectoria dentro del Departamento Judicial de Mercedes, que tuvo a su cargo la investigación conocida como el Triple Crimen de General Rodríguez", y que, "como se verá, ha reconocido en gran medida su participación material en los hechos que se le han endilgado, aunque formulando aclaraciones acerca de su efectivo conocimiento de las finalidades con que serían utilizados sus aportes por parte de la organización".

"Se ha corroborado 'prima facie' que, en connivencia con otros imputados –Marcelo D´Alessio y Rolando Barreiro-, el fiscal de Mercedes llevó adelante actividades de investigación e inteligencia criminal en perjuicio de numerosos ciudadanos/objetivos de la organización investigada", señaló Ramos Padilla en su resolución. 

Además, consignó que según se pudo determinar en la investigación, "en el marco de una relación que se fue construyendo entre este fiscal y agentes, ex agentes o presuntos agentes de inteligencia, de modo informal se intercambiaron información de inteligencia para llevar adelante investigaciones que incluso ni siquiera se encontraban a cargo del imputado, sino de una jueza federal de la Capital Federal, la Dra. (María Romilda) Servini".  En este sentido, el magistrado indicó que, para ese rol, Bidone "se valió de 'espías' con quienes intercambiaba información para avanzar en supuestas líneas de investigación en torno al denominado Triple Crimen, en el que ya no podía intervenir formalmente por haberse remitido por incompetencia a otra jurisdicción en febrero del año 2016". 

Además, aseguró que, incluso, el fiscal recurría a "legajos reservados" con el fin de "reclamar información sensible sobre determinadas personas que, por diferentes razones, fueron objeto de distinto tipo de actividades ilícitas por parte de la organización".