La creciente comercialización de medicamentos a través de canales clandestinos sigue preocupando a los representantes del Colegio de Farmacéuticos de la provincia, quienes se reunieron con autoridades gubernamentales para debatir la situación como “problema de salud pública”.

Desde el Colegio de Farmacéuticos señalaron que el tráfico ilegal de medicamentos “viene sucediendo desde hace tiempo pero recrudece en el presente”, e indicaron la importancia de “concientizar a la población de los peligros de consumir medicamentos adquiridos por canales no habilitados” y la necesidad de controles.

Asimismo, explicaron que la venta se realiza en “ferias de trueque, pequeños comercios, supermercados o maximercados que son abastecidos por distribuidoras que se proveen del mercado negro, con todos los peligros que eso conlleva”.

El defensor del Pueblo, Raúl Lamberto, advirtió que se trata de un “problema de salud pública” y señaló a “los proveedores” de estos medicamentos, quienes “proceden de un mercado paralelo, negro, con escaso control y a veces con medicamentos vencidos”. 

Por otro lado, desde el Ministerio de Salud pusieron la lupa sobre los controles y argumentaron que “muchas veces”, estas transacciones tienen lugar en “comercios que están habilitados por los estados locales y son ellos los que los inspeccionan”.

A nivel local, el Concejo Municipal sancionó en octubre de 2016, una ordenanza donde se establecieron fuertes multas para aquellos comercios que vendan medicamentos y no estén habilitados para dicho fin. Las sanciones van desde 200 pesos hasta más de 6000.