El río Paraná continúa en baja a la altura de Rosario, donde según el último registro alcanzó los 0,47 metros de profundidad, y las autoridades alertan que de no producirse precipitaciones en los próximos días, es posible que se vea dificultada la navegación.

El último comunicado de Prefectura Naval Argentina arrojó que durante las últimas 24 horas el río descendió 2 centímetros más de profundidad a la altura de Rosario, con lo que se dificulta el tránsito de buques por el canal que comunica con el puerto de esa ciudad.

Desde febrero de este año, cuando se acrecentó la bajante, en más de una ocasión los buques se vieron obligados a disminuir sus cargas a la salida del puerto, para navegar sin inconvenientes.

Por eso, el titular de la Prefectura Naval de Rosario, Walter Rosende, pidió a los navegantes deportivos “tomar precauciones”. Es que, con la bajante, se achica el espacio que separa las costas del canal de navegación, que es de uso exclusivo para los buques.

Además, Rosende adelantó que, según los últimos estudios se espera que el caudal continúe bajando “hasta al menos el 31 de octubre”, y puntualizó que luego “dependerá de las lluvias en el norte”. A esto se suman las denuncias de pescadores artesanales rosarinos, que acusan a los frigoríficos de aprovechar la bajante para realizar pescas indiscriminadas.

En ese sentido el pescador artesanal de la costa La Florida de Rosario, Sergio Cabrera, explicó días atrás que “a nosotros la bajante nos perjudica, porque se hace un embudo en el río y el pescado no tiene cómo defenderse, ahí es cuando aparecen los frigoríficos y las grandes cadenas pesqueras a llevarse todo”.

(Télam)