El joven de 20 años acusado de matar a balazos a tres personas y de herir a otras dos en la ciudad de Santa Fe fue detenido este lunes por la tarde cuando se presentó en la casa de un familiar, situada en el barrio Scarafia de la capital provincial.

En declaraciones radiales, su padre le había pedido a Mauro que se entregue y aseguró que su familia está amenazada por allegados a las víctimas, por lo que cuenta con custodia policial desde que sucedió la masacre. Además, vinculó el triple crimen con el tráfico de drogas.

Según la versión de este hombre, en la tarde del domingo Mauro llegó a su casa con otras seis personas. "Estaban todos tranquilos compartiendo una cerveza", dijo el padre (que en el momento del hecho se encontraba trabajando) y agregó: “Se ve que discutieron y todo terminó así".

El hecho ocurrió cerca de las 19 del domingo en una vivienda situada en barrio Scarafía. Los investigadores identificaron a las víctimas como Omar Amarilla, de 33 años; María Soledad Ingui, de 35; y Antonio Matías Fernández, de 16; en tanto resultaron heridos de gravedad Celeste Villarisa, mayor de edad, y Miguel Ravelli, de 35.