La semana pasada el Concejo Municipal aprobó una ordenanza para ensanchar las veredas de zonas comerciales del microcentro de manera provisoria. Con el objetivo de garantizar la distancia social correspondiente para evitar la propagación del coronavirus, la iniciativa busca compensar los estrechos espacios para transitar con los que cuentan los paseos comerciales de la ciudad.

El proyecto, presentado por el concejal Lisandro Zeno, establece que la medida durará lo que se extienda el distancimiento social. Además, se fija que la Dirección de Ingeniería de Tránsito de Rosario haga un estudio de factibilidad para ampliar al menos hasta tres metros una de las dos veredas de una calle comercial. 

Sin embargo, la noticia fue no fue bien recibida por todos los comerciantes. La Asociación Casco Histórico de Rosario encendió las alarmas. "Los cambios en la movilidad de las personas en el centro en general, no tuvieron resultados felices para los comercios. Sólo le alejaron clientes", explicaron.

"El transporte público de Rosario está en una situación calamitosa en todo sentido, reflejado en los informes del Observatorio de Transporte de Rosario, del cual somos parte", consideraron y expresaron su disconformidad con la propuesta.

En un extenso comunicado, detallaron que los carriles exclusivos que supuestamente beneficiarían a los comerciantes, nunca lo hicieron. Ejemplificaron con la deserción de comercios en calle Maipú, Santa Fe y Rioja. 

El principal temor de la Asociación con el ensachamiento de las veredas en calle San Luis y la eventual impleentación de zonas calmas "es que si se piensa retirar el transporte público hacia Mendoza, al estilo de calle Rioja, supondría la anulación de dos paradas claves para la vida del microcentro como es la de Plaza Sarmiento y la de Plaza Montenegro".

En ese sentido fueron categóricos: "El secreto para sacar autos del centro de la ciudad está en mejorar el transporte público. No tenemos otra manera, hace años que lo decimos".

Además, cruzaron a la Municipalidad: "Nos llamaría la atención que, de avanzar estas propuestas, haya dinero para las iniciativas nuevas pero no para realizar las pendientes. Como el cambio de solado de peatonal San Martín, el entorno de la Plaza 25 de Mayo, del Teatro La Comedia y el Hotel Savoy". 

"Sin contar las promesas de solución al abandono de Plaza Montenegro y el inicio de la peatonal Córdoba desde Laprida. Todo anunciado y comprometido oportunamente por la gestión anterior", dispararon.

Por último, expresaron su predisposición al diálogo sobre el futuro del centro y concluyeron: "Hay que invitar a la gente que venga, no a que no lo haga, en este camino solo se seguirá deprimiendo la zona histórica".