Un joven de 19 años murió por los disparos que recibió a última hora del martes en la estación de servicios de bulevar Oroño y Lamadrid, a manos de desconocidos que abrieron fuego desde un auto. Aunque fue trasladado por familiares al Hospital Roque Sáenz Peña, ingresó sin vida.

La directora del hospital, Miriam Zacchino, detalló a Rosarioplus.com que “ingresó después de la medianoche ya fallecido, y aunque se realizó reanimación cardiopulmonar avanzado, las heridas eran vitales”. Las heridas de arma de fuego son al menos seis, entre brazos y piernas y en la zona lumbar.

El vehículo desde el que partieron los balazos sería un Fiat Palio, dato que la policía busca confirmar a partir de filmaciones de videocámaras cercanas. De esos registros, y también de la novia del joven acribillado, que se encontraba en el mismo lugar, aunque resultó ilesa de la balacera.

Testigos del ataque socorrieron al muchacho, identificado como Diego Mansilla, y lo llevaron al hospital Roque Sáenz Peña, donde finalmente pereció por la gravedad de los múltiples balazos que le impactaron, entre las piernas, los brazos y el tronco.

Se desconocen por el momento posibles autores o motivaciones del asesinato, y sólo trascendió que el joven solía estar en esa esquina, por lo que se descuenta que sus asesinos lo conocían desde antes y supieron donde encontrarlo. 

Investiga el crimen personal de la comisaría 21ª y la Justicia