El secretario de Seguridad Pública Omar Pereyra admitió que fue "extraño" el episodio registrado este miércoles entre las fuerzas policiales de Santa Fe y Corrientes tras un operativo antidrogas en Goya que desató una polémica de jurisdicción y de facultades empleadas. “Fue una situación al menos extraña porque se habían cumplido las pautas y pasos procesales dispuestos por el Juzgado federal de Reconquista”, analizó. 

El operativo se enmarca en una extensa investigación del juzgado federal de Reconquista y tuvo como punto de quiebre el hallazgo de una lancha en el río Paraná con un cargamento de marihuana procedente de Goya con destino a Reconquista. Este hecho clave convenció al juez Aldo Alurralde de que estaban las condiciones dadas para realizar ocho allanamientos en Goya.

Tensiones políticas

Lo que debería haber sido un operativo más terminó en escándalo y enfrentó políticamente a dos provincias. Es que, alterado por la situación según testigos, el gobernador correntino Ricardo Colombi se acercó hasta el lugar donde se desarrollaba uno de los allanamientos al considerar que se estaba generando una intromisión en su jurisdicción y pidió por la liberación de un grupo de jóvenes que había sido trasladado en calidad de testigos desde la ciudad de Corrientes, a 250 kilómetros de allí.

El jefe antinarcóticos santafesino José Mario Moyano no le permitió al gobernador entrar a uno de los domicilios allanados al fundamentar que podría fracasar el operativo. Esto generó aún más tensión y luego el propio Moyano fue demorado aunque no se termina de definir si se trató de una orden judicial o política. Recién allí comenzó a circular en los medios de comunicación el episodio. Horas después, la situación se calmó y Colombi dialogó con el jefe de la policía santafesina, José Luis Amaya quien voló en helicóptero hacia Corrientes.

“Al gobernador Colombi le alcanzaba con levantar el teléfono y hablar con el juez federal de su provincia, y lo hubiese puesto en conocimiento”, opinó Pereyra en Sí 98.9, quien defendió que “el procedimiento fue correcto porque se cumplieron todas las pautas”.

“Fue un mandato judicial a partir de una investigación con interceptación de estupefacientes y de personas que tenía vinculación con Goya. El juez dispone las medidas procesales, como detenciones y allanamientos, y en este marco designa qué fuerza, las pautas y además un exhorto al juez de la jurisdicción de Corrientes para informarle”, explicó a la hora de fundamentar que no hubo invasión de jurisdicción sin argumentos.

El propio juez federal de Reconquista, Aldo Alurralde, dijo a la radio Aire de Santa Fe que la intervención “estuvo ajustada a derecho” y que “no es el primer allanamiento que se hace” en otra provincia.