Este domingo se cumplen 101 años del genocidio propiciado por el Imperio Otomano a la comunidad armenia, maco en el que fallecieron un millón y medio de personas, algo que el gobierno de Turquía sigue sin reconocer. En Rosario, la comunidad armenia hará un acto oficial de conmemoración este domingo a las 11.30 en el monolito a los mártires armenios, en el parque de las Colectividades, ubicado en Dorrego y el río.

El genocidio armenio fue el primer genocidio del siglo XX, perpetrado entre 1915 y 1923 por el imperio turco otomano, marco en el que murieron un millón y medio de personas, entre ellas niños, intelectuales, mujeres y familias enteras.

En la actualidad, viven en Rosario más de 300 descendientes de armenios, en una colectividad que ha ido creciendo e integrándose en la ciudad desde la década del 20, cuando llegaron escapando del horror.

El presidente de la colectividad armenia de Rosario Juan Danielian sostuvo en diálogo con Rosarioplus.com que el reclamo de la colectividad armenia es “que el gobierno turco reconozca el genocidio armenio". Abundó: "Desde que existimos como país independiente y democrático (con la caída de la Unión Soviética en 1991) hacemos reclamos formales al gobierno turco y en cada foro internacional”.

“Todos los armenios que vivimos en la diáspora, desde cada país, hacemos también reclamos formales cada año. El gobierno turco sigue negando que haya sido una masacre, diciendo que no fue genocidio porque fue en el marco de la Primera Guerra Mundial, a pesar de que las pruebas son muchas", explicó. Y reforzó: "El 24 de abril de 1915 comenzó con el secuestro de 650 intelectuales y comerciantes armenios, los asesinaron”.

A esto agregó que “luego mandaron a todos los hombres armenios a la guerra, dejando mujeres y niños desamparados. Y finalmente a estos últimos los mandaron al desierto de Siria, donde murieron un millón y medio de armenios”.

Desde la existencia del Estado de Armenia se conoció mundialmente lo que ocurrió, y parte de la sociedad turca comenzó a reconocer su historia. Pero los armenios esperan aún el reconocimiento oficial.