Algunas veces, cuando tocamos a alguien, se siente una descarga eléctrica. Sí, quizá en un abrazo o una palmada en la espalda, poco importa cómo se produzca el roce, pero lo que se siente es una tremenda patada. ¿Por qué sucede esto? La ciencia explica: en verdad no tiene nada que ver con la persona en sí, sino con lo que estuvo haciendo. Y es la misma razón por la que también a veces algunos objetos que no son eléctricos, pero sí conductores, dan electricidad. 

Ese pinchazo eléctrico se produce debido a la electricidad estática. ¿Pero qué es exactamente esto?  Es la energía acumulada en algo que no está en movimiento. 

Todo está formado por átomos que tienen, a su interior, tres tipos de partículas: electrones (con carga negativa), protones (con carga positiva) y neutrones (carga neutra). Aunque en general las positivas y negativas están en equilibrio, cuando una cosa se frota con otra, los electrones se transfieren de una a otra y se acumulan en la superficie del mismo. Cuando este entra en contacto con otro objeto, o una persona lo toca, libera esa carga negativa generando el chispazo.

Se puede decir que la electricidad estática salta de un material hacia otro. Es decir que, al contrario de lo que se cree, no es que haya personas especialmente sensibles a la electricidad estática.