En la zona sur de Rosario, cercano a los grandes hospitales Italiano y Español, se erige el pequeño “Centro Once”, un efector de fachada modesta cuyo personal se puso al hombro una buena causa para concientizar a sus vecinos de la humilde Villa Corrientes, la otrora Villa La Lata, sobre donar sangre y médula ósea. La cita, abierta a todos los vecinos, es este viernes 20 de julio de 10 a 14.

La voluntaria de la ONG Donemos Vida Gabriela Jaramillo contó a Rosarioplus.com sobre el emprendimiento que los médicos y personal del efector de Amenábar 1315 llevan adelante: “Ellos vieron el pasado 30 de mayo el video Dar es dar que hicimos con Cudaio, y decidieron hacer propia la difusión de la importancia de donar sangre y de registrarse para ser eventual donante de médula ósea en aquel barrio que es muy humilde y se necesita concientizar. Nos llamaron para interiorizarse sobre cómo organizar una campaña, y junto a Cudaio y nuestra organización se sumaron para empezar a difundir la actividad de este viernes”.

Desde hace un mes los médicos del efector vienen golpeando puertas a los vecinos y la iglesia del barrio, para notificarles del evento que ya cuenta con un sitio web donde se puede solicitar un turno para ser donante de sangre sin tener que hacer largas colas. También apuestan a vecinos que se sumen de manera espontánea, para durante las cuatro horas realizar las donaciones, e interiorizar a los vecinos de qué se trata la inscripción para ser alguna vez donante de médula ósea “para convertirse como le dicen, en el alma gemela que salve la vida a un desconocido”, relató Jaramillo con emoción.

"Lo que hacen desde este Centro de Salud es algo que deberían hacer todos los efectores cada tanto, pero éste es un comienzo nada menor", opinó.

Se espera una buena concurrencia, para la cual ya varios vecinos reservaron turno, y si bien se puede desayunar o almorzar liviano antes de acercarse, “habrá desayuno para agasajar a los donantes”, prometió la voluntaria.

Puede acercarse todo vecino de entre 18 y 65 años que no consuma drogas, no tenga un tatuaje hecho hace un año o menos, y que no padezca enfermedades infectocontagiosas. “El proceso completo lleva estimadamente unos 40 minutos, entre inscripción, entrevista con médico, medir la hemoglobina, y la extracción es sólo de 10 minutos”, adelantó Gabriela, quien recordó que una vez hecha la extracción, “también se toman otros diez minutos de descanso, donde el vecino se puede tomar un refrigerio, gentileza de la campaña”.

La causa de Florencia para que otros sobrevivan

Flor Straffieri era una joven rosarina de 28 años, médica, que al conocer que padecía leucemia creó la ONG Donemos Vida para “que nadie más pase lo que ella había pasado”, relató a este medio Gabriela Jaramillo. El pasado 12 de julio se cumplieron siete años de su muerte. No sobrevivió a la enfermedad, pero si hubiese encontrado compatibilidad con un donante de médula ósea a tiempo, hubiera vivido.

En simultáneo con su pelea contra la leucemia, Florencia creó la ong al enterarse de la cantidad de personas en su misma situación y el desconocimiento en la sociedad sobre el tema, que generara que haya más donantes inscriptos para encontrar compatibilidades.

“Es increíble saber que cada persona puede salvar vidas en vida, si se registra”, precisó, ya que no se trata de ir y donar como ocurre con la sangre sino de dejar una muestra con la información genética en un banco de sangre, para que al momento de un paciente necesitar médula, se busque compatibilizar, y recién entonces se busca ubicar al donante.

El trasplante es un trámite de unas tres horas, que no duele, y que cabe aclarar que “no requiere una operación quirúrgica, sino simplemente es una trasfusión inmediata, ya que es maravilloso que las células madre al transfusionarse saben dónde alojarse en el cuerpo del paciente”.